Este resultado mejora notablemente el débil registro de marzo, en que tuvo lugar un ascenso de 34.000, de modo que el crecimiento promedio de ambos meses se sitúa en 44.000, en línea con los
observados en los meses anteriores. Se puede afirmar, por tanto, que el mercado laboral mantiene el vigor con el que inició el ejercicio.
Por sectores, en la agricultura, donde el comportamiento es muy volátil, el empleo registró un incremento
por primera vez en 4 meses. En la industria se mantiene el mismo ritmo moderado de crecimiento de los meses anteriores. En la construcción, donde el crecimiento se estancó en marzo probablemente por las desfavorables condiciones meteorológicas, se ha producido un intenso repunte en abril. Algo semejante se observa en el sector servicios, donde la aceleración de abril compensa el resultado más moderado de marzo. El número de desempleados registrados en abril se redujo en 67.420, cifra que, corregida de estacionalidad, equivale a un descenso de 12.000 (cifras desestacionalizadas por Funcas). Los demandantes de empleo ocupados se han reducido en 100.000, frente a 70.000 en abril del pasado año, no obstante, el calendario de Semana Santa fue diferente.
El número de contratos registrados entre enero y abril de 2025 es un 2% inferior al observado en el mismo periodo del año anterior, con un descenso del 4,2% en el número de indefinidos, y del 0,2% en los temporales. Cabe destacar que el 33,4% de los contratos indefinidos firmados en abril fueron fijos discontinuos, porcentaje inferior al del mismo mes del año anterior, lo que puede estar influido al diferente calendario de Semana Santa.
En marzo de 2025 el número de beneficiarios de prestaciones por desempleo ascendió a 1,625 millones, un 9,4% menos que en el mismo periodo del año anterior. No obstante, los beneficiarios de la prestación contributiva crecieron, mientras que bajaron con fuerza los perceptores del resto de prestaciones. El gasto total en prestaciones aumentó un 7,3% con respecto al mismo periodo de 2024, y el gasto medio por beneficiario se disparó un 19% (en 2024 el crecimiento fue del 4%). Este comportamiento resulta de la
aprobación del Real Decreto-ley 2/2024, de 21 de mayo, que modifica algunos aspectos de la regulación de las prestaciones y subsidios por desempleo e incrementa la cuantía y el número de personas que pueden acceder al subsidio. La tasa de cobertura fue del 76,3%, seis puntos más que en el mismo mes del año anterior, o un 77,8% en términos desestacionalizados (cifra desestacionalizada por Funcas). Esta cifra ha registrado una acusada volatilidad en los últimos meses