Genç ha destacado la buena respuesta de los accionistas- tanto institucionales como minoristas – que están respaldando la operación, y ha reiterado su convicción de que BBVA superará holgadamente el 50% de aceptación gracias al atractivo financiero y la lógica estratégica de la operación. Asimismo, ha subrayado que “no tiene sentido esperar a una hipotética segunda opa, que sería muy improbable y no ofrecería ninguna ventaja ni en precio, ni en plazo, ni en fiscalidad. Los accionistas que no acudan ahora a la opa quedarán fuera, sin beneficiarse del precio ofrecido”.
Durante su intervención, ha hecho hincapié en que, como es habitual en este tipo de ofertas públicas, la mayoría de las aceptaciones se concentran en los últimos días del proceso. De hecho, en operaciones recientes en Italia y en anteriores en España, cerca del 75% de las aceptaciones se registraron en los tres últimos días. “Estamos muy satisfechos con lo que estamos viendo estos días”, pues “ya se percibe una dinámica claramente positiva”, ha dicho.
En primer lugar, por la reacción de los distintos tipos de inversores. “Entre los inversores institucionales activos – que incluyen también lo que llamamos ‘arbitrajistas’-, que representan aproximadamente el 30% del capital de Sabadell, una inmensa mayoría, casi todos con los que hemos hablado, van a acudir a la oferta, porque basan su decisión en los fundamentales”, ha afirmado. Una cifra clave para estos accionistas es que obtendrían un beneficio por acción tras la fusión un 41% superior en la entidad combinada, frente a Sabadell en solitario. “Es decir, si hoy ganas 100 euros de beneficio, si acudes a la oferta tu beneficio por acción pasará a 141. Estos inversores profesionales ven claramente la lógica y van a acudir a la opa”, ha remarcado.
Respecto a los inversores institucionales pasivos, que suponen alrededor del 20% del capital, ha indicado que “poseen acciones de Sabadell porque forma parte de un índice, por ejemplo el Ibex 35. Acuden en función del nivel de aceptación que esperan. Si creen que alcanzaremos el 60%, acudirán en esa proporción”. “Además, tienen un sesgo positivo”, ha explicado.
En cuanto a los inversores minoristas, que representan cerca del 40% del capital, ha señalado que “veremos cómo evolucionan los próximos días, pero hemos introducido una mejora clave. Aunque su custodio pueda ser otro banco como Sabadell, hemos permitido que los accionistas minoristas acudan a la oferta a través de una oficina de BBVA, sean o no clientes, y totalmente gratis”. Gracias a esta facilidad, junto con la decisión de David Martínez —consejero y mayor accionista individual de Sabadell, con cerca del 4%— “estamos viendo una clara aceleración en el número de accionistas que está acudiendo a la oferta”. Al respecto, ha añadido que si la oferta es buena para todos los inversores institucionales y para el mayor accionista individual de Sabadell, también lo es para el resto de los accionistas.
Además, Onur Genç ha explicado que BBVA es custodio de aproximadamente el 2% de las acciones de Sabadell, lo que nos permite ver datos diarios. “Esperamos estar a cierre del día de hoy en cerca del 40% de aceptaciones en este grupo de accionistas”.
El consejero delegado ha recordado que aunque BBVA cuenta con la opción legal de reducir el umbral mínimo de aceptación “claramente, creemos que superaremos el 50%”. En su opinión la discusión sobre una posible rebaja del umbral o una segunda opa no es relevante, ya que “es un escenario muy improbable”, ha apuntado. Por tanto, ha explicado que si BBVA supera el 50% de los derechos de voto de Sabadell, no habrá segunda opa y los accionistas que no acudan quedarán fuera, sin beneficiarse del precio ofrecido. Sólo podría darse, hipotéticamente, si el nivel de aceptación quedara entre el 30% y el 50%.
Sobre el precio al que se fijaría esa hipotética segunda opa, Genç ha sido contundente: “Lo que está pasando en el mercado no es aceptable y lo que dice Sabadell no es correcto”. El consejero delegado ha explicado que toda la información está recogida en el folleto, el documento legal que rige la operación. En su página 53, se refiere al artículo 9.2.e (del real decreto de opas) que determina el precio equitativo en una opa cuando la adquisición previa ha sido a través de un canje de valores y que está directamente relacionado con el artículo 9.1 descrito por Genç en su intervención. Este último establece que el precio de una segunda opa —si llegara a producirse, lo cual es muy improbable— sería el precio máximo pagado por BBVA por acciones de Sabadell en los últimos 12 meses. Dado que BBVA no ha comprado acciones fuera de esta opa en curso, “el precio de una hipotética segunda opa sería el mismo que el de la opa actual. No sería diferente en ningún caso”.
En resumen, “si el precio es el mismo, ¿por qué esperar?”, se ha preguntado. «Habría que preguntarse por qué otros están animando a los accionistas a esperar. No hay duda: es mejor aceptar ahora. Esperar no tiene sentido”. Onur Genç ha hecho hincapié en que una segunda oferta puede que nunca exista y no aportaría ninguna ventaja ni en precio, ni en tiempo, ni fiscalmente.