«Acumulan, generan mucha prosperidad y en vez de compartirla lo que hacen es una acumulación insolidaria. ¿Y cómo? Con rebajas fiscales, que alteran la competencia» entre territorios, y se suma el efecto capitalidad que les favorece, ha dicho en una entrevista del diario ‘Ara’. «Quiero que haya una norma mínima básica para evitar que nos hagamos daño», y ha tachado de trampa bajar los impuestos a quienes más tienen y a la vez recortar políticas públicas, frente a lo cual plantea un modelo de prosperidad compartida, pagando impuestos en proporción a la riqueza y al patrimonio de cada uno.
Ha negado que la ministra de Hacienda, Montero, sea un problema en la financiación por ser la candidata a la Junta de Andalucía: cree que «en ella está la solución» y que se lo está tomando muy en serio.
Sobre el calendario para una nueva financiación, ha dicho que irá lo más rápido que pueda pero no a costa del rigor y la seguridad, y ha defendido que en su año de presidencia «se ha avanzado más en financiación autonómica que en los últimos años».
Illa ha afirmado que está cumpliendo el acuerdo de investidura con ERC y su compromiso sobre la financiación: «Lo haremos y lo haremos bien».
Respecto a que el acuerdo de investidura fijaba que el IRPF se recaudara desde 2026 pero será en 2028, ha respondido que no se puede «jugar con esta cuestión ni hacerlo de forma precipitada y que no salga bien». «Para hacerlo con solvencia y con rigor, y de acuerdo con los estudios que hemos realizado y con la realidad que nos hemos encontrado, éste es el camino», ha asegurado.
Al preguntársele si firmó entonces el acuerdo de investidura desconociendo la realidad de la Agència Tributària de Catalunya (ATC), lo ha negado y ha insistido en ser rápido pero «sin sacrificar solvencia» al conseguir que la Generalitat gestione todos los impuestos. Para él, «es una opción» que este traspaso implique que trabajadores de la Agencia Tributaria estatal pasen a trabajar en la ATC, pero ha asegurado que, sea como sea, se respetarán las condiciones y derechos laborales de todos.
Además, ha considerado de sentido común «ofrecer a aquellas personas que quieran incorporarse a ellos que puedan hacerlo», en referencia a pasar de la agencia estatal a la catalana.
Como balance de su año de presidencia ha dicho que Cataluña «se ha vuelto a poner en marcha» y ha recordado su objetivo de liderar económicamente España, algo en lo que incluye superar a Madrid en porcentaje de PIB. En cuanto al 15% lineal de aranceles de EEU. aceptado por la UE, acepta el acuerdo sin «demasiado entusiasmo» y con el consuelo de que elimina la incertidumbre.
El presidente ha dicho que cumplir la ley de amnistía es «la primera prioridad» actual del encaje entre Catalunya y el resto de España, y ha deseado que así empiece el próximo curso político.
Ha incluido en ese deseo a su antecesor y líder de Junts, Puigdemont, aunque no aclara si han hablado ni si le verá antes de que lo haga el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez: «Cuando me reúna, si me reúno, lo daré a conocer».
Illa espera que Sánchez agote la legislatura, defiende que pueda gobernar incluso sin Presupuestos y constata que «muchos de los que ahora se rasgan las vestiduras lo han hecho».Cree que el Gobierno de Sánchez es el que mejor va a Cataluña y a toda España, y no ve como sucesor al líder del PP: «Feijóo no llegará a la Moncloa».