«No se puede ni plantear, no puede ni tramitarse, no quiero ni pensar que eso llegue a aprobarse. El PSOE no puede ni tan siquiera tomarla en serio, es destrozar la separación de poderes. Somos un Estado democrático y no lo podemos permitir», ha sostenido este jueves en un desayuno jurídico organizado por el Colegio de la Abogacía de Madrid. Guilarte ha calificado nuevamente de «aterradora» esa propuesta y ha aplaudido que «el PSOE no ha participado de esta idea». «Y confiemos en que sea sí, porque supondría el fin de nuestra arquitectura institucional, una amenaza», ha indicado.
Dicho esto, ha comparado la iniciativa de Podemos con «las leyes de la dictadura», porque supondría «unificar en un único poder todos los poderes del Estado».
Fue el pasado 30 de abril cuando Podemos registró una iniciativa para reformar el modo de elección del CGPJ y habilitar la opción de elegir a los vocales por mayoría absoluta en las Cortes Generales en caso de no lograrse el consenso de las tres quintas partes del arco parlamentario en primera vuelta, lo que rebajaría el peso del Senado –ahora con mayoría del PP– en la designación del Consejo.
A la pregunta de quién tendría que irse por la situación del CGPJ, que no renueva a sus vocales desde 2018 por la falta de acuerdo entre los partidos políticos, ha sostenido que deberían dimitir «todos los diputados y senadores».»Por elevación, que dimitan todos los diputados y todos los senadores. Igual que me dicen que dimita yo, que dimitan ellos», ha expresado Guilarte.
Guilarte ha sostenido que lo que ha fallado para llegar a esta situación es «la política en términos generales». A su juicio, si se hubiera producido la renovación del CGPJ cuando tocaba, hace cinco años, el sistema de elección, que «venía funcionando con cierta normalidad, podría haber seguido funcionando prácticamente igual». «Pero no a día de hoy, porque la polarización política nos ha invadido y el deseo de los partidos por captar cotas de poder es evidente. Creo que el sistema que nos ha valido durante muchos años, a día de hoy no valdría por culpa, insisto, de la política», ha reiterado.
Guilarte ha vuelto a desechar la opción de una dimisión grupal de los vocales para que se desatasque la situación: «Quien no esté a gusto que se vaya, si quiere, pero la mera exigencia de una dimisión en grupo me parece un absoluto disparate. Alguien tiene que seguir defendiendo la independencia del Poder Judicial en momentos difíciles».
Para el dirigente, los miembros actuales del CGPJ no son los causantes del problema. «Que se dirija a quienes lo están causando, y no a nosotros, la crítica de la no renovación», ha insistido en alusión a los políticos, al tiempo que ha lamentado que Congreso y Senado no hayan «acusado recibo» de su propuesta para evitar futuros bloqueos.
En todo caso, Guilarte ha indicado que tiene buena relación con los negociadores de PSOE y PP y que espera que el ministro de Justicia, Félix Bolaños, pilote la negociación y se arregle el problema. Pero ha criticado las formas con las que ambos partidos están negociando: «Tengo la terrible sensación de que se juntan, se vuelven a contar cada uno lo suyo y no pasa nada, a día de hoy no conocemos si han avanzado».
Según Guilarte, los dos partidos «parecen estar un poco más en mantener su discurso y venderlo, en culpabilizar al otro de la falta de renovación, que en una aproximación real a un espacio de entendimiento que no se intuye».
Sobre cuándo podría dejar el cargo, Guilarte ha reiterado que quiere irse «en agosto y tranquilo». «Hay que dejar pasos a otras personas, a ver si lo consiguen. Las hay, sin duda», ha afirmado.