Mucho me temo que la respuesta es la misma que la de los votantes españoles la otra noche con la canción de la pobre Melody, ni medio voto, ni un solo español, salvo los que come-pesebres de siempre, que esos no cambian y ahí siguen a la sopa la boba. Y es que ese el truco, el leit motiv de toda una campaña orquestada desde Moncloa y que las terminales mediáticas del sanchismo siguen a pie juntillas y sino no hay mas que poner la tele o escuchar la Ser. Ambas siguen el adoctrinamiento como fieles perros falderos. Y junto a ellas los ministros encabezado por el fontanero mayor, el ministro López que acusa a los que nos seguimos esas tonterias de «falta de patriotismo» y asegura que RTVE, se ha situado «en el lado correcto de la historia».
Pero la guinda de toda esta verbena la ha puesto el mismísimo don pedrito y nunca mejor dicho lo de pequeñín, porque se ha descolgado, ni mas ni menos con la petición de que la UER expulse de Eurovisión a Israel. Añadiendo que nadie se llevó las manos a la cabeza cuando» cuando tras la invasión rusa de Ucrania se exigió la salida de Rusia de competiciones internacionales. Y por tanto, tampoco debería hacerlo Israel, porque lo que no podemos permitir son dobles estándares, tampoco en la cultura».
Para fenómeno de la corrupción, la justificación de esta postura esta en que, «la cultura no es solamente una fuente de identidades, sino de bienestar, de cohesión social, de cohesión territorial, un motor económico imprescindible para nuestro país en este cambio de paradigma que estamos viviendo, no solamente con la transformación digital y ecológica, sino también desde el punto de vista de esos flujos de conocimiento que se dan en el ámbito de la cultura».
¿Usted entiende este porque hay que dilapidar a los votantes del concurso que tanto ah “encabronado” a nuestro “amado” líder?
Si es así explíquemelo, por favor, porque yo lo único que entiendo es que se ha montado una enorme bola de nieve para que no se hable de Begoña, David, Ábalos, Koldo, Aldama, García Ortiz, etc. y los ciudadanos sigan con una venda sobre sus ojos y le permitan seguir mangoneando todo lo que pueda el Estado y su Constitución.