Bueno habrá que precisar. El señor presidente ha lanzado el primer anuncio aprovechando su estancia – y van ya ni se sabe cuántas – en la cadena ser de mano de una sus amigas presentadoras, En concreto don pedrito, ha anunciado que el Gobierno inicia este martes el primer trámite para blindar el aborto en la Constitución. «Vamos a iniciar el trámite requiriendo el dictamen al Consejo de Estado, el órgano consultivo del Gobierno de España, para iniciar la reforma constitucional e incorporar el blindaje de la interrupción voluntaria del embarazo en el artículo 43 de la C.E.».
Sánchez no ha descartado un referéndum al respecto, pero ha recalcado que su intención es iniciar la reforma constitucional desde el Ejecutivo para introducir el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo en el artículo de la carta magna que recoge el derecho a la protección de la salud. Además, pretende que se obligue a los poderes públicos a garantizar el aborto en condiciones de igualdad efectiva para todas las mujeres.
Para el jefe del Ejecutivo es necesario seguir el camino de Francia porque, con independencia de que exista la ley del aborto, hay gobiernos autonómicos que «por cuestiones ideológicas, de dogmatismo y de sectarismo» la incumplen.
Evidentemente, el okupante de La Moncloa disparaba con pólvora del rey a su enemiga la presidente de Madrid. Pero lo hacia tan burdamente que puede que le salga el tiro por la culata, por la sencilla razón que para hacer lo que dice que van a hacer necesita los votos en la Cámara de los populares, y es mas que archisabido que estos no votaran nunca jama a favor de lo que anuncia Sánchez y después ha confirmado sus niñas, Alegria, Redondo y García en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.
Así las cosas, el montaje queda al descubierto y por mucho que lo repitan a lo largo de los próximos días y semanas estamos ante un debate estéril que ira perdiendo fuerza conforme se vaya viendo su inutilidad, pero eso si puede que el sanchismo recupere algún voto feminista perdido y eso es importante, aunque Tezanos asegure que si hubiese elecciones barrerían porque ya ni en Moncloa ni en Ferraz dan crédito a sus opiniones.