La iniciativa busca acelerar la descarbonización del transporte pesado por carretera y combatir el cambio climático. Al mismo tiempo que pretende mejorar la eficiencia en el consumo de combustible, limitar su alto consumo, y disminuir el coste para los operadores logísticos y para el país. La alianza se concibe como un lugar común donde todas las empresas de la cadena de valor del transporte pesado de mercancías se unan, identifiquen los cuellos de botella y propongan las soluciones que permitan acelerar la electrificación del transporte por carretera.
Es la primera alianza que reúne a todos los sectores implicados en la electrificación del transporte pesado por carretera: fabricantes, infraestructura de recarga, operadores logísticos y clientes finales. El objetivo es establecer una colaboración estratégica entre sus miembros y posicionar a la industria española como tractora en la electrificación, más específicamente, al transporte de mercancías por carretera.
La iniciativa, además, pretende desarrollar una hoja de ruta, convirtiéndola en pionera en Europa, y servir como palanca para adaptar y acelerar la regulación necesaria para la consecución de los objetivos de descarbonización.
La alianza ha sido presentada en un evento en las oficinas de Iberdrola en Madrid al que asistieron más de 100 representantes de administraciones públicas, organizaciones sectoriales y empresas vinculadas a toda la cadena de valor del sector del transporte pesado de mercancías.
La alianza se alinea con la lucha contra el cambio climático de la Unión Europea y con su objetivo de que todos los países miembros reduzcan sus emisiones de gases de efecto invernadero en, al menos, un 55% en 2030. En la Unión Europea, el transporte pesado de mercancías representa únicamente un 1% de la flota total de vehículos. Sin embargo, es responsable del 25% de las emisiones de gases de efecto invernadero y del consumo energético del transporte por carretera.
Consciente de la relevancia de la descarbonización de este sector, la Unión Europea ha establecido exigencias a los países miembros y a los fabricantes mediante las siguientes reglamentaciones:
• El Reglamento sobre la Infraestructura para los Combustibles Alternativos, que establece objetivos a los países miembros para la instalación de infraestructuras de recarga para vehículos pesados en la UE en los próximos años.
• La propuesta de revisión del reglamento de estándares de emisiones de CO2 para camiones que, si se acepta, incluye un objetivo de reducción de CO2 del 90% para los nuevos camiones en 2040.