El encuentro anual de los consumidores intensivos de gas ha reunido a industriales y al sector energético para debatir sobre la actualidad y los desafíos que afronta la industria gasintensiva, y celebrar juntos el décimo aniversario de la Asociación.
En su discurso de inauguración, la presidenta de GasINDUSTRIAL, Rivière, destacó los diez años de trabajo intenso, diálogo institucional y defensa activa de la competitividad industrial, y recordó que “fortalecer la industria es la mejor garantía para la estabilidad del sistema gasista”.
El balance del 2025 sigue siendo delicado para el consumidor gasintensivo. En los últimos años, la industria ha sufrido una pérdida estructural del 20% de la demanda de gas. Una caída que no cesa, este año la demanda de gas industrial es un 6% menor que en el mismo periodo del año anterior.
Hace un año, la industria recibió el Informe Draghi con un halo de esperanza, un nuevo plan para la prosperidad y la competitividad sostenible de Europa. El sector aplaudió sus propuestas, pero doce meses después, se ha avanzado poco. El mismo Draghi ha vuelto a advertir de la lentitud de las reformas y del riesgo de quedarnos atrás en crecimiento, inversión y costes energéticos. Rivière señaló que el Informe Draghi, publicado en 2024, “corre el riesgo de quedarse en un cajón”, y reclamó “decisiones que se noten en el €/MWh —peajes y cargos justos, contratos estables y gases renovables realmente competitivos”.
• La industria ha sufrido en los últimos años una pérdida estructural de la demanda de gas del 20%.
• El gas natural es puente imprescindible para la transición energética competitiva.
• GasINDUSTRIAL pide un marco regulatorio equilibrado, que se traduzca en peajes justos y en un coste energético competitivo.
• Los gases renovables serán el futuro, pero ahora la transición energética debe hacerse con cabeza y números.
• La industria gasintensiva reclama el desarrollo del Estatuto del Consumidor Gasintensivo.
Hoy por hoy, el gas natural es el combustible de la transición energética: una energía puente imprescindible mientras avanzamos hacia un modelo plenamente renovable, pilar de un sistema más sostenible y motor de la competitividad industrial. “De ahí la necesidad de disponer de un gas natural y unos peajes competitivos”, explicó la presidenta de GasINDUSTRIAL, quién solicitó un marco regulatorio equilibrado, que se traduzca en peajes justos y en un coste energético competitivo. ”Necesitamos una retribución del sistema gasista razonable, que refleje una actividad regulada por BOE, y que no vuelva a las sobreretribuciones del pasado. La metodología de la CNMC corrigió gradualmente los excesos del pasado”, y continuó, “conviene recordar que cada euro adicional de retribución regulada se traduce en más peajes y menos competitividad para la industria española”.
En su discurso, Rivière fue tajante: “La transición energética solo será una oportunidad si se construye sobre bases competitivas”. Los gases renovables y el hidrógeno verde deben alcanzar precios asumibles para la industria, de modo que su adopción no ponga en riesgo el tejido productivo. La trasposición del paquete de gas y el impulso de los gases renovables, el biometano y el hidrógeno deben desarrollarse bajo criterios de disponibilidad, eficiencia y coste. “La descarbonización no puede construirse sobre un tejido productivo debilitado por obligaciones y costes energéticos desproporcionados” -reiteró la presidenta de la Asociación – “Los gases renovables serán el futuro, pero ahora la transición energética debe hacerse con cabeza y números”.

