Si no es así, resulta difícil de entender como todo un ministro de Justicia y no se cuántas cosas mas se permite la desfachatez de decir barbaridades sin tan siquiera parpadear y además no una di dos, sino durante cuatro horas que es lo que ha durado su comparecencia en la Comisión de Justicia del Senado.
Así para este señor, la instrucción de la jueza Biedma sobre el hermano de su adorado jefe es inoportuna y falsa porque existe un «ciclo del bulo» en el que «un pseudo medio publica una noticia falsa, inmediatamente un grupo ultra financiado por un abogado del PP presenta una querella y se instrumentaliza la Justicia».
De esa manera, en su opinión los populares deben de aclarar si pedirán perdón «a todas las personas honestas y progresistas que están viendo manchado su nombre» por querellas presentadas por «grupos ultra», en referencia a causas judiciales como las que afectan a Begoña Gómez y David Sánchez, mujer y hermano del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Es mas, su memoria es flaca poque en su opinión el PP tiene «cientos de años de condenas por corrupción» y «docenas de altos cargos condenados en firme», mientras lo comparan «con casos donde no hay nada de nada «y todo ello sin acordarse de que la corrupción empezó con Filesa, Malesa, Roldan y un larguísimo etc. que llega hasta los ERE, la condena mas importante de la historia política española reciente
Y claro esta no el quedo otra que terminar reafirmando su «confianza absoluta» en la Justicia, aunque defendió poder discrepar «con respeto» de algunas resoluciones judiciales en uso de la libertad de expresión.
Ante tales desmanes no ,les parece imposible pensar que salvo unos pocos jueves que luchan contar un tsunami de incalculables proporciones y duración, lo que se dice justicia, cada vez menos, y no digamos nada cuando este tipo de gentuza mete la mano para servirse de ella y evitar cualquier tipo de control de sus desmanes.