En el caso de las compraventas de fincas registradas, el número de transmisiones fue de 93.927, con una disminución anual del 10,3%. El 86,1% de las compraventas registradas en noviembre correspondieron a fincas urbanas y el 13,9% a rústicas. En el caso de las urbanas, el 58,0% fueron compraventas de viviendas.
El número de compraventas de fincas rústicas bajó un 7,1% en noviembre en tasa anual y el de fincas urbanas un 10,8%. Dentro de estas últimas, las compraventas de viviendas registraron una disminución anual del 15,1%. El 93,1% de las viviendas transmitidas por compraventa en noviembre eran libres y el 6,9% protegidas.
En términos anuales, el número de viviendas libres transmitidas por compraventa disminuyó un 14,4% y el de protegidas un 23,5%.El 18,9% de las viviendas transmitidas por compraventa en noviembre eran nuevas y el 81,1% usadas. El número de operaciones sobre viviendas nuevas bajó un 11,1% respecto a noviembre de 2022 y el de usadas un 16,0%.
Murcia (16,7%), Castilla y León (15,6%) y Cantabria (9,2%) registraron las tasas anuales de variación más elevadas en noviembre en el número total de fincas transmitidas. Por su parte, Extremadura (–25,9%), Comunidad de Madrid (–12,2%) y La Rioja (–12,1%) presentaron las tasas anuales más bajas.
Atendiendo a las compraventas de viviendas registradas, las únicas comunidades autónomas en las que aumentaron fueron Principado de Asturias (6,6%), Cantabria (5,1%) y Castilla–La Mancha (2,6%). Por su parte, Extremadura (–34,5%), La Rioja (–28,3%) y Comunidad de Madrid (–25,7%) registraron los mayores descensos.
Ante estos datos, Font, director de estudios de pisos.com destaca que “las cifras registradas en noviembre siguen confirmando la tendencia a la baja que se ha producido a lo largo del 2023. Con la caída interanual de -15% ya se acumulan 10 meses de retrocesos ininterrumpidos. El retroceso acumulado en lo que llevamos de año sigue aumentando y ya se sitúa en el -9,3%, acercándose al -10%, con el que posiblemente se cierre el año. Si analizamos lo que ha pasado en el conjunto de los últimos 12 meses las operaciones ya se sitúan por debajo de las 600.000 por primera vez desde febrero del 2022, cuando a principio de año superaban las 650.000”. En este sentido, el director de Estudios recuerda que “estas caídas se producen especialmente en la vivienda usada, que cae un -16%, mientras que la obra nueva cae un -11%”.
Territorialmente, quienes lideran la estadística son Andalucía, la Comunitat Valenciana y Cataluña con cerca de 10.000, 8.000 y 7.500 operaciones, respectivamente. En la parte más baja está La Rioja con 292 transacciones. Durante este mes hay tres comunidades en las que se han vendido más viviendas que hace un año: Asturias, Cantabria y Castilla la Mancha. Llaman la atención las grandes caídas que se producen en los mercados que lideran el sector, con registros del -26% en Madrid, -16% en Catalunya o el -15% de Andalucía.
Por su parte y desde el Consejo General de los Colegios Oficiales de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de España se destaca que “esta nueva caída era la esperada y no supone un síntoma de alarma”. “De hecho, en tasa intermensual, la compraventa de viviendas subió un 2,1%, lo que va aplanando la evolución a la baja de las operaciones. Si bien las cifras interanuales negativas se van a seguir produciendo en los próximos meses hasta encontrar una cierta estabilización a mediados de 2024, cuando el mercado entrará en una fase de equilibrio debido a la normalización de los precios y unos tipos de interés menos fluctuantes”.
Para esta entidad. “El número de operaciones sobre viviendas nuevas bajó un 11,1% respecto a noviembre de 2022 y el de usadas un 16,0%, por lo que la obra nueva vuelve un mes más a aguantar mejor la bajada de la demanda en el segmento residencial. Y es que el interés por comprar viviendas de primera mano va en aumento desde la pandemia. Además, no es de extrañar que las principales autonomías por volumen de operaciones registren bajadas interanuales abultadas: Madrid un -25,7%, Canarias un -18,9%, Baleares un -16,9%, Catalunya un -16,3%, Andalucía un -15,4% y la Comunidad Valenciana un -12,5%”.
En este contexto,el Consejo General de los COAPI de España prevé que “la tendencia bajista del sector inmobiliario se revierta este 2024” y resta importancia a los datos macroestadísticos registrados durante el 2023. “Teniendo en cuenta que el contexto económico, político y legislativo no ha sido el idóneo hasta el momento, es normal que un mercado tan sensible como el de la vivienda haya notado los efectos. El dinero es miedoso, sobre todo en el caso de los pequeños ahorradores, que necesitan estabilidad para la toma de decisiones financieras tan importantes”.
En otro orden de cosas, Martín, director general de Vivienda ha defendido el contenido de la Ley de Vivienda, negó que su contenido suponga “una traslación de responsabilidad a los propietarios” y aseguró que el Gobierno “está desarrollando muchos instrumentos que son lo que realmente definen la política de vivienda”.“La Ley contempla que los grandes tenedores que ya tienen implementados procesos de mediación en sus empresas encuentren desde el primer momento a la Administración para que dé una solución a las dos partes en caso de conflicto. Empieza a haber un sector sólido porque la inercia está creada al haber instrumentos de ayuda para movilizar suelo público, así como la preocupación de generar colaboraciones público-privadas. Por ello, necesitamos que el sector privado esté alineado con esta hoja de ruta”, subrayó el director general de Vivienda.