Los costes de los materiales y de la mano de obra siguen siendo elevados en muchas economías, lo que ha provocado una presión adicional sobre los márgenes.
Se prevé que el segmento residencial no crezca en 2024 en un entorno de elevados tipos de interés que están estrangulando las capacidades familiares. La producción no residencial y la ingeniería civil aumentarán un 2,8% y un 4,4%, respectivamente. Las Estados Unidos, Europa y China siguen abogando por grandes proyectos de infraestructuras para impulsar el potencial productivo de sus economías y apuntalar el crecimiento. La creciente urbanización de los mercados emergentes o las exigencias de reformas para mejorar la eficiencia energética de los edificios, son otros impulsores del crecimiento.
Entre los riesgos para el desempeño del sector está la intensa competencia del entorno en la mayoría de los mercados, con márgenes reducidos y compradores públicos que suelen pagar con retraso, lo que incrementa la proporción de quiebras. Además, le sector afronta una escasez de mano de obra cualificada, que puede aumentar sus costes salariales, especialmente en muchos mercados avanzados de Europa. Además, el sector representa el 36% del consumo mundial de energía y el 40% de las emisiones de CO2.
El riesgo de crédito para las empresas de la construcción ha aumentado en la mayoría de los mercados europeos. Crédito y Caución prevé que el sector crezca un 0,7% en la eurozona en 2024, en línea con una recuperación económica modesta y altos tipos de interés. La actividad actual se sustenta en la acumulación de trabajo y en los proyectos públicos financiados por la Unión Europea para aumentar la eficiencia energética. La construcción residencial debería empezar a recuperarse cuando se produzca la relajación monetaria. En Estados Unidos el crecimiento del sector alcanzará un 4,4% en 2024. Tanto para la producción no residencial como para la de ingeniería civil, se espera un impulso del 4,8% y del 8,0%, respectivamente. Por el contrario, se prevé que la construcción residencial vuelva a contraerse un 1,7% en 2024, afectada por el significativo aumento de los tipos de interés.
En China, Crédito y Caución prevé que el sector crezca sólo un 1,7% este año y se contraiga un 0,2% en 2025. Se prevé que el segmento residencial se contraiga un 2,9% en 2024, ya que las turbulencias en el inmobiliario se mantienen después de que la inversión disminuyera casi un 10% en 2023. Existe un importante problema de exceso de oferta. Para resolverlo será necesario sanear el exceso de existencias y apalancamiento de los promotores inmobiliarios. Actualmente, el sector está cambiando hacia un enfoque centrado en la vivienda social, con un papel más activo de la Administración. Se espera que los segmentos de edificación no residencial y la ingeniería civil, impulsada por la inversión pública en sectores estratégicos como la recarga de vehículos eléctricos y las energías renovables, aumenten un 0,9% respectivamente en 2024.