La moderación del consumo privado y la recuperación de las compras en tiendas tradicionales en detrimento del canal online, fuerte impulsor del negocio en los últimos años, motivaron un debilitamiento en la evolución del número de operaciones y la citada desaceleración del ritmo de crecimiento del mercado. El segmento de paquetería empresarial contabilizó una tasa de variación del 4,5%, manteniendo un comportamiento ligeramente más favorable que el de paquetería industrial. Este último aumentó un 3,6%, hasta los 2.850 millones de euros, frente a los 6.450 millones de la paquetería empresarial. La reactivación del comercio internacional, tras el parón provocado por la pandemia y sus consecuencias, explica el mayor dinamismo de la demanda de envíos con origen o destino en el extranjero. Considerando la actividad conjunta de paquetería empresarial e industrial, los servicios internacionales generaron en 2022 un volumen de negocio de 2.325 millones de euros, un 5,9% más que en el año anterior, frente al crecimiento del 3,6% registrado por los servicios nacionales.
El empeoramiento de la coyuntura económica, la alta inflación y la subida de tipos de interés, junto con la incertidumbre político-económica nacional e internacional, hacen prever que a corto y medio plazo se prolongará la tendencia de ralentización del mercado. En este marco, el volumen de negocio generado por las empresas de mensajería y paquetería podría aumentar en torno a un 3% anual en el período 2023-2024. Esta evolución daría lugar a una cifra cercana a los 9.900 millones de euros en el último año.
Los procesos de fusión y adquisición entre empresas, y el cese de actividad de algunos operadores medianos y pequeños, dieron lugar a un descenso del número de empresas, el primero en los últimos diez años. Las cinco primeras empresas del segmento de paquetería empresarial alcanzaron una cuota de mercado conjunta del 48%, ligeramente superior al 46% que reunieron las cinco compañías con mayor facturación en el segmento de paquetería industrial.