La titular de la Fiscalía autonómica ha confirmado hoy ante el instructor de la causa, el juez Francisco José Goyena que fue el propio García Ortiz quien le envió un whatsapp con el texto de la nota que contenía datos confidenciales del empresario González Amador y le ordenó que la publicase desde su oficina de prensa. Una orden a la que, Lastra se negó.
Lastra habría confirmado que fue el propio fiscal general del Estado quien, inicialmente, pidió a la titular provincial de Madrid Rodríguez, en situación de querellada, el total de los mails intercambiados entre el fiscal asignado a la causa Salto y el abogado de la pareja de Díaz Ayuso, en el marco de la causa tributaria en la que se investigaba a este último, por un posible delito tributario.
Para cumplir con la solicitud, Rodríguez sacó de un partido de fútbol de la Liga de Campeones, entre el Atlético de Madrid y el Inter de Milán, al fiscal Salto, en la noche del 13 de marzo, con el objetivo de que el remitiese «ya mismo» los correos. Unas comunicaciones que la fiscal provincial tuvo, en su posesión, desde antes las 22.00 horas de ese mismo día, y una hora y media antes de que se hiciese eco de las mismas el primer medio de comunicación, la cadena SER.
Una vez en poder de la cúpula fiscal, según la versión dada por la fiscal Lastra al juez, la oficina de comunicación de la Fiscalía General del Estado envió una nota ya redactada, con extractos literales del contenido de dichas comunicaciones, al jefe de prensa de Fiscalía de la comunidad de Madrid, el día 14 a las 6.30 de la mañana. La responsable de dicha territorial, Almudena Lastra se negó a publicar la nota y su director de comunicación, también citado hoy a declarar en sede judicial, amenazó con dimitir si se publicaba, porque «suponía una lesión abosluta de la confidencialidad prevista en la ley completamente innecesaria».
Ante las órdenes «inmediatas e imperativas» de García Ortiz y tras la negativa de su jefa, la fiscal Lastra a asumirla, fue su homóloga de la provincial y el director de comunicación de su oficina quien ecogió la nota que le habían enviado, en un documento propio, sin referencias a la Fiscalía superior de la comunidad de Madrid y lo envió a la prensa, por el grupo de whatsapp de periodistas que tiene activo con los mismos.
Ésta información es la que el fiscal general del Estado ha tratado de mantener ajena al conocimiento del magistrado Goyena, instructor del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) quien, este mismo miércoles, emitía una breve pero contundente providencia publicada por este diario en exclusiva, en la que rechazaba la maniobra extraprocesal de García Ortiz, aunque no es parte en la causa ni está «llamado» por el juez, para elevar las pesquisas al Supremo –donde él es aforado–, aunque sosteniendo, en todo momento, que no hubo nada delictivo en lo ocurrido.