En efecto, por primera vez, China ha superado a Europa como creador de nuevos principios activos, con 25 frente a los 17 del viejo continente, y lejos de EEUU que ya le arrebató la corona en la década del 2000, El sector invierte 50.000 millones de euros en investigación, emplea directamente a 900.000 personas y produce por valor de casi 400.000 millones de euros, pero las cifras se quedan cortas frente a la marcha de los EE UU y China,
Según datos del portal estadístico de la Unión Europea, Eurostat, la industria farmacéutica es el sector de alta tecnología con mayor valor añadido por empleado y es también el sector con la ratio más alta entre inversión en I+D y ventas netas. Asimismo, según el informe 2023 EU Industrial R&D Investment Scoreboard, las industrias de la salud invirtieron más de 260.000 millones de euros en I+D en 2022, lo que representa casi el 21% del total de todos los sectores industriales a nivel mundial.
Sin embargo, el sector se enfrenta a grandes desafíos. Además de los obstáculos regulatorios y el aumento de los costes de la I+D, “el sector se ha visto gravemente afectado por el impacto de medidas de austeridad fiscal introducidas por la mayoría de gobiernos europeos desde 2010”, reza el informe de Efpia. A esto hay que sumar el rápido crecimiento de la I+D biomédica en mercados emergentes como Brasil, China, Corea e India, que está implicado una migración gradual de las actividades de investigación y desarrollo de medicamentos desde Europa a estas nuevas áreas en expansión.
De hecho, por primera vez, China ha superado a Europa como creador de nuevos principios activos, con 25 frente a los 17 del viejo continente. Estados Unidos sigue liderando este ranking con 28 de un total de 90 nuevas moléculas, una posición que arrebató a Europa tras una fuerte apuesta por la I+D biomédica entre 1995 y 2005 y que se ha ido consolidando e incrementando en la última década.
Los planes de la Comisión pueden acelerar la caída de la posición de Europa como región innovadora mundial en comparación con Estados Unidos, China y Japón, regiones que han apostado por fomentar las inversiones en I+D biomédica en los últimos años. De hecho, nuestro continente lideraba la I+D biomédica hace 20 años. En 2010, Europa representaba el 37% de la I+D mundial; en 2020, esa cifra había caído al 32%. Las nuevas investigaciones proyectan que para 2030 esa cifra se habría reducido aún más, al 25%, y para 2040, a sólo el 21% de la actividad de investigación y desarrollo en comparación con las otras regiones. Mientras tanto, se espera que la contribución de China salte del 2% en 2010 al 17% en 2040.