La subida del indicador general tuvo lugar como consecuencia de la presión al alza ejercida por los carburantes y la electricidad.
Datos
La inflación general subió hasta el 3,0% en septiembre (2,7% en agosto).La inflación subyacente se mantuvo en el 2,4% en septiembre (2,4% en agosto).La inflación núcleo se situó en el 2,7% (2,6% en agosto).
Valoración
El INE revisa al alza en 1 décima tanto el dato de inflación general de septiembre como el de inflación subyacente hasta el 3,0% y el 2,4%, respectivamente. La subida del indicador general tuvo lugar como consecuencia de la presión al alza ejercida por los carburantes y la electricidad. La inflación núcleo, que excluye alimentos y energía, se situó en el 2,7%. Tanto la inflación de los servicios como la de los bienes industriales se mantuvieron en septiembre en el 3,5% y el 0,7%, respectivamente. Tras el fin de la temporada estival, el precio de los principales servicios turísticos ha moderado su evolución y ha reducido así su presión sobre la inflación de los servicios. No obstante, en los últimos meses, la evolución de los precios de los servicios presenta una evolución cada vez más marcada por la dinámica de los servicios de revalorización periódica. En su última actualización, estos servicios experimentaron un notable incremento, lo que mantiene su tasa de variación interanual estable en niveles relativa–2,9% en agosto), como al de la electricidad hasta el 16,8% (14,7% en agosto). No obstante, este incremento responde principalmente a efectos base. Aunque en términos intermensuales el precio de la energía descendió un 0,2%, la caída del 3,0% registrada en septiembre del año pasado supone un efecto base que ejerce presión al alza en la variación interanual del componente energético.
Los principales indicadores sitúan el pico de la inflación en septiembre. La inflación general en septiembre se ha situado 1 punto por encima del registro de mayo, mes en el que se inició el actual repunte de precios. Este incremento se debe, principalmente, al encarecimiento de la energía y de los alimentos frescos. Para los próximos meses, los mercados de futuros anticipan un ligero descenso de los precios de la energía. Por otro lado, la estabilización del precio de los alimentos frescos refuerza la idea de que su tendencia alcista habría llegado a su fin. En conjunto, todos estos factores apuntan a que el repunte de la inflación podría haber tocado techo en septiembre, y prevemos que la inflación se sitúe en torno al 2% a final de año.