Este auge en la preocupación por la contención en la financiación atiende a una inflación elevada y persistente, sumada a la séptima subida de tipos consecutiva que sitúa estos ya en un 3,75 %, niveles máximos desde el comienzo de la crisis financiera. “Es comprensible que los inversores se muestren más precavidos ante operaciones que involucren altas cifras monetarias”, afirma Jacobo Lacalle, Socio y director de Líneas Financieras de Jhasa, bróker de seguros y reaseguros independiente especializado en los sectores de construcción, energía y M&A. Como experto, ve en el encarecimiento del coste de financiación o en la posible reducción del valor de la rentabilidad de las empresas el principal freno en el cierre de operaciones.
En este contexto, los principales riesgos que acompañan a las operaciones de M&A se hacen más evidentes, abarcando desde los descubiertos en due diligence, hasta los potenciales o totalmente desconocidos y ajenos a los inversores. Por tanto, desde Jhasa se enfatiza en la necesidad de contar con expertos mediadores capaces de generar una transición estable y dotada de las medidas necesarias para asegurar estas operaciones y abordar de manera proactiva las posibles contingencias, favoreciendo la financiación y reduciendo potencialmente los posibles costes imprevistos.
Impulso para las operaciones de m&a en la segunda mitad de 2023
A pesar de esta etapa de ralentización, los expertos de la compañía se muestran optimistas y ven viable una activación de las operaciones que están en standby hasta la fecha. Así, se prevé que surjan nuevas oportunidades interesantes en materia de fusiones y adquisiciones, una vez que los inversores hayan ajustado los riesgos a corto plazo y termine el ciclo de las subidas de tipos, ya atisbado por el Banco Central Europeo.
“El mercado español sigue siendo altamente atractivo para inversores nacionales e internacionales, por su diversificación empresarial, su marco regulatorio estable, su ubicación estratégica o su inversión en innovación y tecnología. Esto ocasiona que, a pesar del enfriamiento en los procesos de fusión y adquisición, siga habiendo un alto interés en llevar a cabo estos en un corto y medio plazo”, afirma Lacalle, quien prosigue concluyendo que: “como expertos, somos conscientes de la incertidumbre que emerge sobre cualquier proceso de este tipo actualmente, por lo que siempre recomendamos contar con pólizas específicas que minimicen los riesgos para los inversores, facilitando así una mayor confianza en la transacción”.