La conversación, moderada por Buch, han tenido la oportunidad de analizar cuáles son las necesidades y desafíos a los que nos enfrentamos en el actual proceso de cambios tecnológicos y cómo esta transformación puede contribuir a un empleo más ético y sostenible, con especial foco en la transición energética.
En este sentido, Sánchez López se ha referido a los cambios que las transformaciones tecnológicas aplican en el mercado laboral. El impacto en el empleo en cada territorio es muy diferente, por lo que el Instituto para la Transición Justa trabaja para identificarlos y desplegar herramientas que los neutralice, tratando de atraer nueva inversión y en contacto directo con los municipios. Desde su punto de vista, hay que prestar mucha atención al impacto territorial para que estos procesos de transición no generen pobreza o desempleo en las zonas afectadas, teniendo en cuenta siempre a las personas y “sin dejar a nadie atrás”.
Sobre el impacto en el empleo de estos procesos de cambio se ha referido también el director gerente de Fundae, quien ha señalado que “las corporaciones van a pasar de corporaciones financieras a corporaciones captadoras de talento. En este nuevo paradigma, la gestión del conocimiento tendrá un papel clave. Además, a este proceso disruptivo se suma otra disrupción adicional del sistema productivo como será la IA”.
El trabajo en tres ejes, – territorio, tipo y tamaño-, es muy relevante. Cuanto más permeables sean las compañías a la formación y atracción de talento, mejor pervivirán. Es una de las ideas que ha señalado Acevedo en relación con los cambios en la gestión de personas que tendrá que asumir el sector privado.El diálogo social es clave para el proceso de transición justa. “Trabajamos para asegurar que los territorios afectados por la transición energética atraigan nueva inversión. Y, a día de hoy, hemos conseguido atraer 7.000 millones de euros en proyectos alternativos en estas zonas”.
Además, Sánchez ha querido poner de relevancia la importancia de políticas públicas que generen inversión, ya que la innovación y desarrollo es palanca clave para generar industria competitiva europea, y la inversión pública atrae inversión privada en tecnología verde, con un gran impacto en el empleo. Ambos expertos han coincidido en que todos los sectores están impactados por la transición ecológica, por lo que esto implica un cambio de las tareas que se desarrollan en toda la cadena de valor, lo que desemboca en la generación de nuevas profesiones que deben ser formadas y mantener actualizadas formativamente a lo largo de toda la carrera profesional. En este sentido, la formación es un elemento clave.
Acevedo ha puesto en valor los hubs de generación de información entre asociaciones y corporaciones para conocer las nuevas necesidades para el empleo que requiere la sociedad, ya que las nuevas tecnologías están cambiando los sistemas productivos de forma acelerada, y es necesario amplificar la velocidad en los programas formativos para capacitar a los profesionales necesarios para el cambio, ha apuntado.
Para finalizar su intervención, la asesora sobre Transición Justa ha querido tener una referencia a la igualdad de género. “Si mantenemos este ritmo, necesitamos 265 años para conseguir la igualdad de género en estos sectores productivos. Esto nos pone de manifiesto el desafío que tenemos por delante. Si bien se están dando pasos ya que 4 de cada 10 nuevas personas que trabajan en estos nuevos sectores son mujeres, solo suponen el 18% del total. Tenemos que multiplicar x5 todo lo que hacemos”. En este sentido, ha resaltado la importancia de los programas de formación profesional en clave de género que desarrolla Fundación Naturgy.
Por su parte, Acevedo ha indicado que “desde la administración pública somos conscientes tanto de la necesidad de formación en empresas involucradas en la transición energética como de la necesidad de facilitar la participación de mujeres en la misma y para ello, contamos con Digitalízate, iniciativa en colaboración con el SEPE, que ha sido reconocida por la UE como buena práctica para la digitalización de las empresas y que ofrece de manera gratuita más de 1.500 recursos formativos ofertados por empresas tecnológicas punteras o la convocatoria de Microcréditos, especialmente de la línea de personas, en la que puedes conseguir tu Microcrédito de 600 € para formarte en la adquisición de nuevas competencias para la transformación digital, verde o productiva”.
En la apertura de la jornada, la directora general de Fundación Naturgy, Coronado, se ha referido a la necesaria ocupación y preocupación por la generación de empleo a futuro. “Para captar el potencial de generación de empleo de la transición energética y la transformación digital, tenemos que trabajar en ello aportando recursos, colaboración con alianzas público-privadas o políticas públicas. Pero también trabajando en la formación, tanto de las personas que ya están en el mercado laboral para recapacitar sus competencias como aquellas que accederán a este mercado en el corto y medio plazo”.
Coronado ha puesto en valor que la creación de empleo para las transformaciones actuales requiere colaboración en red entre todos los actores, para que quede enmarcada también dentro de una transición justa. En esto se enfoca el trabajo de Fundación Naturgy.
En el cierre de la sesión, Morán, vicepresidente del Capítulo Español del Club de Roma, ha hecho hincapié en que “de alguna manera, somos nosotros los que podemos tener un aprendizaje que vaya más allá de la educacion pero que permita adaptarnos de manera innovadora a estos cambios sociales que se avecinan”.