Plaza, presidente de Laboral Kutxa, ha asegurado que el banco apostará por los ámbitos de negocio en los que haya «margen de mejora» para fortalecerlos e «incrementar la rentabilidad para garantizar la pervivencia del proyecto». La entidad ha cerrado un ejercicio 2023 con un beneficio «extraordinario», según el directivo, y se mantiene abierta a «nuevas posibilidades» para seguir creciendo este año. La cooperativa de crédito ha emitido un comunicado detallando las conclusiones de la su asamblea general ordinaria celebrada este sábado en el Palacio Kursaal de San Sebastián, en la que los accionistas han aprobado por unanimidad las cuentas y la gestión del pasado año.
Plaza, que ha concluido hoy su primera asamblea como presidente, se ha mostrado satisfecho con los resultados del año anterior, señalando que han formado un nuevo «techo histórico» para al entidad, gracias al que podrá «abordar los programas estratégicos previstos para afrontar los retos de futuro».
Además, ha recordado que en 2024 se cumplen 65 años de la fundación de Laboral Kutxa que, según ha recalcado, ha demostrado en todo este tiempo su «capacidad de adaptación a escenarios muy diversos». Ha recordado que en 2009 operaban casi 200 entidades en España y que actualmente solo 93 de ellas mantienen su actividad, al tiempo que ha destacado que «el mérito de Laboral Kutxa no es permanecer sino estar en mejor forma que nunca».
Por su parte, Egibar, director general de esta entidad, integrada en la Corporación Mondragón, ha recordado los resultados de 2023, cuando Laboral Kutxa obtuvo un beneficio neto de 222,7 millones de euros, lo que supone un incremento del 47,99% respecto al año anterior. La rentabilidad sobre los fondos propios se elevó hasta el 10,78%, ha precisado Egibar, quien ha destacado que, en términos de resultados, se trata de un «ejercicio de récord». En cuanto al plan de gestión para 2024, Xabier Egibar ha puesto de relieve su «excelente punto de partida», en una situación financiera «solvente y saneada», que además viene acompañada de una «notable mejora de la rentabilidad».
Para lograr los objetivos fijados en la «doble agenda estratégica», que implica «competir en el presente y transformarse de cara al futuro», Laboral Kutxa apuesta por diferentes vías, entre ellas continuar con su «singular política de remuneración del pasivo, que inició de forma pionera a mediados del pasado ejercicio», expandir su negocio con empresas y avanzar hacia una entidad «más tecnológica» sin olvidar los «valores cooperativos», ha comentado.
En este mismo sentido, el presidente de la entidad ha recordado el propósito «irrenunciable» de Laboral Kutxa, que se resume en «orientar toda su actividad financiera hacia la búsqueda de un progreso conjunto para la sociedad, sin que nadie se quede atrás».