«Hemos adoptado la decisión adecuada, pero esto no significa que los tipos de interés vayan a seguir una senda lineal descendente. Podrá haber períodos en los que volvamos a mantener los tipos», ha afirmado en una entrevista con los diarios ‘Expansión’, ‘Handelsblatt’, ‘Il Sole 24 Ore’ y ‘Les Echos’.
La francesa ha insistido en que las decisiones del Consejo de Gobierno vendrán dictadas por los datos y que prestarán especial atención a la evolución de los salarios y a cómo los beneficios unitarios están aumentando y absorbiendo parte de los costes laborales, factores importantes que afectan a la inflación de los servicios, «que es nuestro punto débil».
Si miramos nuestro indicador de los salarios, vemos hacia donde se dirige, pero podría haber baches en el camino», ha remarcado.
Unas declaraciones que coinciden con las palabras de la presidenta en la rueda de prensa posterior a la decisión de tipos del BCE y en la que insistió que «los datos determinarán la velocidad y el momento de esa senda descendente». «Estamos moderando el nivel de restricción monetaria, pero el ritmo dependerá de los datos. Puede haber baches por el camino en la senda de la desinflación», decía Lagarde en ese momento. De cara a futuras decisiones monetarias, la presidenta ha indicado que «dar indicaciones ahora, condicionando un período temporal, no es útil». «Nos ataríamos las manos en un momento en el que el viento y las olas agitan al barco, y no podríamos arriar las velas».