Las ventas de deuda en el mercado público sindicado de la región alcanzaron este hito el jueves, según datos de Bloomberg. La cifra incluye emisiones sindicadas públicas denominadas en euros, libras esterlinas y dólares bajo formato Reg S vendidas en Europa. Los estados soberanos, los organismos supranacionales, las agencias y las entidades financieras han liderado esta ola de endeudamiento. La creciente necesidad de financiar la acumulación de deuda ha impulsado las emisiones por parte del sector público, como lo demuestra el caso del Reino Unido.
La Oficina de Gestión de Deuda británica recaudó el martes 4.250 millones de libras (5.380 millones de dólares) a través de una emisión sindicada, la primera desde que la ministra de Hacienda, Reeves, anunció 40.000 millones de libras en subidas de impuestos y un aumento del endeudamiento el mes pasado. La demanda superó los 65.000 millones de libras, el nivel más alto registrado para una oferta de ‘gilts’ indexados a la inflación. Países como Bélgica, Francia, Grecia, Italia y España también han registrado cifras récord de demanda para su deuda.
El volumen de nuevas emisiones es notable, sobre todo porque supera el récord establecido hace cuatro años, cuando los prestatarios acudieron masivamente al mercado para reforzar sus finanzas ante la pandemia de Covid. Los bancos y las empresas inmobiliarias han sido de los principales beneficiados por las favorables condiciones casi constantes del mercado para emitir nueva deuda. El martes, la sueca Heimstaden Bostad AB realizó la primera emisión de deuda subordinada de una empresa inmobiliaria desde finales de 2021. La semana pasada, el banco austríaco Raiffeisen Bank International AG recaudó nuevo capital para reemplazar un bono de nivel adicional 1, más de seis meses después de que un intento anterior fracasara.