Aunque esto sigue siendo así, las infraestructuras se han ido también adaptando a las nuevas necesidades. Podemos distinguir ahora:
Infraestructuras para la Digitalización. La demanda de electricidad es creciente y lo seguirá siendo. Una de las mayores demandas procede de las necesidades de la Inteligencia Artificial y los centros de datos.
Infraestructuras para la Descarbonización: se requieren grandes inversiones para mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de las infraestructuras existentes, algo a lo que también ayudará la digitalización. Entrarían aquí temáticas relacionadas con la gestión del agua, desarrollo de tecnologías como el hidrógeno verde…
Infraestructuras para los retos de Demografía: transporte, mejora de la conectividad, ciudades inteligentes, edificios, centros logísticos, envejecimiento de la población…
En el contexto actual, nuestros expertos del Área de Inversiones consideran especialmente interesante la inversión en infraestructuras relacionadas con la revolución tecnológica y la transición energética. Por otro lado, se prevé que en los próximos años se hagan importantes inversiones para el desarrollo de infraestructuras en los países emergentes y en modernización de las existentes en los desarrollados.
La electrificación se está convirtiendo en el verdadero cuello de botella tanto para la descarbonización como para el despliegue de la Inteligencia Artificial. Según datos de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la inversión mundial en infraestructuras de red rondó los 400.000 mn$ en 2024 y podría aumentar hasta 600.000 mn$ anuales en 2030. Se estima que el consumo eléctrico de los centros de datos, la IA y el sector de las criptomonedas podría duplicarse de aquí a 2026.
A pesar de las perspectivas para el sector, no podemos olvidar los riesgos que existen. La inversión en esta temática conlleva un riesgo alto y el cliente ha de ser consciente de que puede sufrir pérdidas de capital.
Hay distintas alternativas para exponerse a esta temática; podemos hacer a través de acciones, ETF o fondos de inversión.
KBI Global Sustainable Infrastructure (IE00BKPVHQ28)
Invierte principalmente en acciones de empresas del sector de las infraestructuras sostenibles, entre ellas:
suministro o tratamiento de agua, aguas residuales y energía.
infraestructuras energéticas o hídricas (ej, instalaciones para el tratamiento de agua).
infraestructuras para fomentar la producción y la distribución eficiente de alimentos y cultivos.
suministro, mantenimiento o mejora de otras infraestructuras que brinden un beneficio a la sociedad.
First Trust Nasdaq® Clean Edge® Smart Grid Infrastructure UCITS ETF (IE000J80JTL1)
Tiene como objetivo ofrecer a los inversores resultados que se correspondan, por lo general, con el precio y el rendimiento del índice de renta variable Nasdaq® OMX Clean Edge Smart Grid Infrastructure (el «Índice»), antes de descontar comisiones y gastos. El fondo invierte principalmente en títulos de renta variable incluidos en el Índice. El fondo procura reproducir, antes de comisiones y gastos, el rendimiento del Índice.
El índice invierte en empresas que se centran en adaptar las infraestructuras de red eléctrica para enfrentar el ingente aumento de demanda impulsado por la inteligencia artificial, centros de datos y electrificación.
