Las cotizadas de la Bolsa española han ido mejorando su retribución al accionista en los últimos meses, al dejar atrás los recortes o en muchos casos la suspensión por culpa de la crisis provocada por la pandemia. En enero las compañías han desembolsado 2.028,78 millones de euros vía dividendos, lo que supone una mejora del 53% frente a los 1.330 millones que se repartieron en el primer mes del año pasado.
Los pagos de enero pisan el acelerador en los repartos y vuelven a niveles de 2019 cuando las cotizadas españolas repartieron 2.741 millones de euros. El ejercicio empezó con los desembolsos, sobre todo, del sector energético. Iberdrola llevó a cabo su programa de dividendo flexible en enero por el que desembolsó 1.145 millones de euros. Por su parte, la petrolera Repsol, otra de las cotizadas que suele retribuir a sus accionistas en los primeros días del ejercicio, retribuyó a sus accionistas el 11 de enero. Por un lado, repartió 0,325 euros brutos por acción con cargo a reserva, y por otro, uno a cuenta de 2022 que ascendió a 0,025 euros. Entre los dos casos entregó alrededor de 490 millones de euros.
Acerinox, Gestamp, Redeia o CIE Automotive han sido otras de las compañías que repartieron dividendo en el primer mes del año.
Las previsiones de los analistas para este año son positivas. Varios factores influirán en que 2023 sea el año definitivo de la vuelta a las generosas políticas de retribución al accionista. «La mayoría de las compañías del índice es previsible que mejoren sus dividendos, aunque ello va a depender en gran medida del ciclo económico; de la mayor o menor ralentización del crecimiento económico en España y a nivel global», explica Juan José Fernández-Figares, director de análisis de Link Securities.
El ejercicio va a suponer la vuelta al dividendo de las compañías más penalizadas por la crisis provocada por la pandemia, como las turísticas. El nuevo plan estratégico de Aena recoge que la compañía recupera el dividendo, ya con cargo al ejercicio 2022, con un pay out para el periodo 2022-2026 previsto en un 80% sobre el beneficio neto antes de los ajustes contables por los descuentos de las rentas de los contratos comerciales a los que obligó el Gobierno como consecuencia del Covid.
También Amadeus quiere recuperar la política de retribución al accionista. En noviembre, la compañía planteó retomar el pago de dividendos con cargo a 2022. El dividendo definitivo se conocerá cuando la empresa publique sus cuentas y será sometido a la votación de su junta de accionistas del próximo junio. La política de dividendos en vigor prevé una propuesta de reparto (pay out) de entre un 40% a 50% del beneficio del ejercicio.
Entre los pagos más elevados previstos en 2023 destacarán los de Acciona y su filial Acciona Energía. Eduardo Imedio Cano, analista de Renta 4, espera un fuerte aumento del dividendo fruto de los resultados de la filial de renovables –donde prevé una mejora del 82% en el beneficio neto respecto a 2021–, por lo que estima un dividendo de Acciona Energía con cargo a 2022 de 0,55 euros, frente a los 0,28 euros de un año antes. Para Acciona estima 5,85 euros frente a los 4,11 del ejercicio anterior.