De este modo, el valor del mercado se situó en 4.250 millones de euros al cierre de 2022, tras aumentar un 9,7% en 2021 y un 11% en 2022. A pesar de estos crecimientos, la cifra de mercado se situó todavía por debajo de la alcanzada en 2019. La distribución especializada acaparó el 53,6% de las ventas totales, con un valor de 2.280 millones de euros en 2022 y un aumento del 11,8%.
Dentro de este segmento, los establecimientos integrados en cadenas fueron los que mostraron el mejor comportamiento (+18,8%), hasta alcanzar un valor de 1.010 millones de euros. En el caso de los detallistas independientes las ventas se situaron en 1.270 millones de euros (+6,7%).
Respecto a la distribución no especializada, contabilizó un incremento del 10,1% en el conjunto del ejercicio 2022, llegando a situarse en 1.970 millones de euros.
Las previsiones sobre la evolución del mercado minorista de calzado a corto plazo son positivas, esperando que continúe la tendencia alcista, aunque es previsible una moderación en el ritmo de crecimiento ante la pérdida de dinamismo del consumo de los hogares. Así, el valor de las ventas podría crecer en torno al 5% en 2023, hasta alcanzar los 4.450 millones de euros al cierre del año.
En junio de 2023 se encontraban operativos unos 7.900 establecimientos especializados en la venta minorista de calzado, generando un empleo de alrededor de 20.000 trabajadores. Ambas magnitudes han registrado una tendencia a la baja en los últimos años. Las cadenas especializadas y grandes superficies han seguido reforzando su posicionamiento en los últimos años. Los cinco primeros operadores del sector en términos de valor de las ventas minoristas de calzado en 2022 alcanzaron una participación conjunta del 18,5% sobre el valor total de las ventas, porcentaje que se situó en el 23,4% al considerar a los diez primeros.