Sin embargo, esta tendencia podía revertirse en la parte final del año, advierten desde el holding Grupo Moure. “A pesar de la reciente tendencia a la baja en los precios de los carburantes en España, el futuro del mercado sigue siendo incierto”, asegura el director general. Montero, y añade, “varias semanas consecutivas de descensos han llevado tanto al diésel como a la gasolina a niveles inferiores a los que se registraban antes de la invasión rusa en Ucrania, lo que podría interpretarse como una normalización tras la volatilidad extrema de los últimos años”. Entre los factores que podrían afectar a que este periodo bajista no sea permanente destacan que la cotización del petróleo siga estando influenciada por cuestiones geopolíticas y económicas a nivel global, el aumento de tensiones entre importantes regiones productoras o decisiones clave de la OPEP, entre otros.
Pese a estas dudas en torno al futuro, Montero celebra los precios del carburante para el inicio de este nuevo curso, ya que supondrán “un respiro económico” para familias y empresas que dependen del transporte, y una oportunidad para “redistribuir recursos” hacia otros gastos o ahorros necesarios en muchas familias: “el coste de llenar un depósito medio ha bajado entre 10 y 11 euros en comparación con el año pasado”.