«Seguimos comprometidos con una estrecha coordinación de nuestras políticas económicas, con vistas a aumentar la resistencia de nuestras economías», indica la declaración del encuentro, en la que los líderes han invitado al Eurogrupo a seguir supervisando «estrechamente» la evolución económica. En el texto también señalan que la Unión Bancaria ha reforzado «significativamente» la resistencia del sistema bancario de la UE, que es «resistente, con sólidas posiciones de capital y liquidez», por lo que han instado a que prosigan los «esfuerzos» para completar la Unión Bancaria en consonancia con la declaración del Eurogrupo del pasado verano.
Además, conscientes de que «unos mercados de capitales más desarrollados contribuyen a mejorar la gestión macroeconómica», han pedido que se intensifiquen los esfuerzos colectivos, con la participación de los responsables políticos y los participantes en el mercado de toda la Unión, para hacer avanzar la Unión de Mercados de Capitales.
También han destacado que el marco de gobernanza económica es un «pilar clave» de la arquitectura de la Unión Económica y Monetaria, que apoya la estabilidad del euro y la resistencia de la economía de la zona del euro, por lo que consideran que una arquitectura financiera europea «fuerte» es fundamental para atraer inversiones sostenidas, apoyar la innovación y la creación de empleo y acelerar las transiciones ecológica y digital.