En marzo, los hogares españoles poseían un saldo de letras del Tesoro por 10.847 millones de euros, que ha crecido durante el mes de abril en 2.359 millones de euros, según los datos difundidos hoy por el Banco de España. El dato contrasta con la tenencia casi inexistente de hace un año, previa a la primera subida de tipos de interés del BCE, que tuvo lugar en el mes de julio. En abril de 2022, los particulares apenas tenían 14 millones de euros en letras. La cifra comenzó a despegar a partir de septiembre, en que ya rozaba los 100 millones de euros después de que el rendimiento de las letras ya hubiera pasado a terreno positivo en todos los plazos, también a tres meses.
Las letras del Tesoro se han consolidado en este ejercicio como una clara alternativa para el ahorro más conservador, a la vista de que los depósitos bancarios se resisten a recoger en sus rendimientos el aumento del precio del dinero. La banca no está actualizando apenas el incremento de los tipos y está dirigiendo en cambio a los clientes hacia los fondos de renta fija como fórmula con la que sacar partido del nuevo entorno de las tasas de interés.
En el mes de junio el interés que paga el Tesoro por las letras ya ha conseguido incluso superar la inflación, con lo que la rentabilidad real es mínimamente positiva. Con un IPC de mayo en el 3,2%, nueve décimas por debajo del de abril, el tipo ofrecido por las letras a tres meses en la subasta de este mes ha sido del 3,263% y en las de nueve meses, del 3,49%. En las letras a un año, las más demandadas en lo que va de año, la rentabilidad que ha pagado el tesoro en junio ha vuelto a ascender, al 3,468%. En las de seis meses, es del 3,392%, también en ascenso al hilo de las subidas de tipos de interés por parte del BCE.
La tenencia de letras por parte de los particulares ha alcanzado récord en términos absolutos y también en términos relativos. Se ha superado ya el máximo de 2007, cuando los pequeños ahorradores españoles poseían el 10,97% del saldo emitido en letras del Tesoro. A cierre de marzo, según datos del Tesoro, ese porcentaje ya alcanzaba el 14,95%.