La banca mantiene la morosidad a raya. El volumen de crédito dudoso ha cerrado el mes de julio en el 3,42%, lo que supone su nivel más bajo desde diciembre de 2008, cuando ascendía al 3,37%. La tasa encadena dos meses consecutivos a la baja después de situarse en junio en el 3,43% y se reduce desde el 3,5% que marcaba hace justo doce meses, según arrojan los datos del Banco de España (BdE). La evolución obedece al menor saldo de dudosos, que se contrae en más de 1.326 millones, influida a su vez por las mayores amortizaciones anticipadas.
El freno del euríbor también contribuye de forma positiva y da un respiro a los hipotecados. Durante el séptimo mes de 2024 el índice de referencia en el mercado hipotecario experimentó un retroceso de más de doce puntos básicos, situándose en el 3,5%, cifra que se ha seguido moderando. Cuando queda una semana para terminar septiembre, éste ya se mueve por debajo del 3%, al calor del ciclo bajista de los tipos de interés iniciado por el Banco Central Europeo (BCE). Aunque la institución ofrece el dato agregado, también separa por bancos, cajas y cooperativas, que pasa desde el 3,39% al 3,31%, y recuperan niveles de 2008 después de que el saldo de impagados se redujera en 453 millones, hasta los 37.379 millones. De forma paralela, analiza los establecimientos del crédito al consumo, cuya tasa se eleva en dos décimas y asciende al 6,64%. Si bien los préstamos impagados bajaron seis millones en un mes hasta 2.877 millones.
El encarecimiento de la financiación hace ya dos años puso en alerta al sector bancario ante un posible repunte de la morosidad, que finalmente, no ha tenido lugar. La resistencia del mercado laboral y las medidas impulsadas por el Gobierno para ayudar a hipotecados en apuros han contenido la tasa, registrando su pico más elevado en lo que va de 2024 en el 3,62%. Cabe destacar que en este contexto la concesión de préstamos registró una contracción en 2023 y no ha sido hasta este ejercicio, con la vista puesta en que el precio del dinero se abarataría, cuando ha comenzado a remontar la demanda.
La nueva producción hipotecaria vive un momento dulce después de que haya registrado su mejor mes desde 2010 con la concesión de 6.660 millones en nueva producción hipotecaria, un 25% más interanual. Aunque su comportamiento suele responder a la tendencia alcista registra en julio antes del parón de agosto con motivo de las vacaciones de verano, la evolución se produce en mitad de una tendencia creciente. Su crecimiento va en línea con el experimentado por el crédito al consumo, que vive unos meses de récord después de rebasar la barrera de los 101.000 millones en saldo vivo.