Así, alcanzó la cifra de 400 millones de euros, un 2,6% superior a la de 2023, en el que se había contabilizado una variación del 6,8%. El menor dinamismo de la demanda, tras los fuertes crecimientos de años anteriores, y la dificultad que de nuevo tuvieron las empresas del sector para subir precios impidieron un mayor crecimiento del valor del mercado.
El segmento de mobiliario sigue siendo el de mayor peso específico, aunque su participación en el mercado total se redujo hasta el 53%, al crecer únicamente un 1,4%. Por su parte, el de tabiquería desmontable registró un incremento del 2,5%, mientras que el de sillería mostró el mayor dinamismo, aumentando un 4,3%.
El valor de las exportaciones se cifró en 261 millones de euros, un 3,3% menos que en 2023. Este hecho es atribuible al negativo comportamiento de la familia de mobiliario metálico, que registró un retroceso del 11,4%. La Unión Europea reunió el 65% de las exportaciones españolas de mueble de oficina, destacando especialmente Francia. Por el contrario, tras el acusado descenso acumulado en los dos ejercicios anteriores, las importaciones repuntaron un 10,3% en 2024, cuando alcanzaron los 172 millones de euros. China siguió reforzando su papel como principal origen del mobiliario importado, acaparando ya algo más del 40% del valor total.
La estructura de la oferta muestra una creciente concentración. Los cinco primeros operadores alcanzaron en 2024 una cuota de mercado conjunta del 44%, en tanto que los diez primeros reunieron el 60%.