Se trata de las baterías que hibridarán los parques fotovoltaicos de Tabernas I y II, en la provincia de Almería, y El Escobar y Piletas I, en Las Palmas (Canarias), también gestionados por Naturgy.
Estos proyectos de almacenamiento están incluidos en la cartera total de diez proyectos que Naturgy quiere poner en marcha en 2026, nueve de ellos hibridados con plantas fotovoltaicas y un proyecto de almacenamiento stand alone, conectado directamente a red, en Vigo (Pontevedra). Con estos proyectos la compañía sumará una potencia total de 160 MW y 342 MWh de capacidad al sistema energético nacional.
Estas infraestructuras contribuirán a reforzar la calidad de suministro eléctrico e impulsarán la transición energética al favorecer una mayor y más eficiente integración de las energías renovables en la red, ya que podrán almacenar energía para suministrarla en momentos de menor producción solar.
Los proyectos de almacenamiento con baterías de Naturgy se reparten por un total de cuatro comunidades autónomas y supondrán en su conjunto una inversión total superior a los 80 millones de euros.
La capacidad de almacenamiento total de estos diez proyectos de baterías de ion litio es de aproximadamente 125.000 MWh/año, lo que equivale al consumo anual de más de 38.000 viviendas. Los proyectos, cuya entrada en vigor está prevista en 2026, han sido financiados por la Unión Europea – NextGenerationEU en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Estos sistemas de baterías permiten almacenar energía renovable para suministrarla cuando sea necesario en momentos de escasa producción, flexibilizando la producción de energía renovable y garantizando su integración en el sistema.
Según las proyecciones del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), en 2030 el mix energético estará compuesto en un 81% por energías renovables en la generación eléctrica. Esta situación plantea al sistema energético el reto de dotarse de herramientas de flexibilidad para gestionar la producción, acompasar generación y consumo, evitar caídas bruscas de la producción y dar capacidad firme al sistema.
En este escenario, el almacenamiento es clave en la seguridad y calidad del suministro, y por ello el PNIEC prevé la instalación de 22,5 GW de almacenamiento hasta el 2030. Además, en febrero de 2021 el Gobierno de España publicó su Estrategia de Almacenamiento Energético, donde las baterías estacionarias son una de las claves para la flexibilidad del sistema eléctrico.