«Este es un mensaje de manipulación de un comprador que utiliza el miedo para decir ‘a ver si me venden’, pero no es correcto», anota. A su juicio, las acciones del vallesano seguirán su recorrido al alza también en el caso de que la entidad siga con su camino en solitario, ya que sus valores «están soportados por los fundamentales, que hoy están un 37% por encima del valor de cotización del banco».
El banquero recuerda, además, que el conjunto de analistas otorga a la acción un valor que está un 15-20% por encima del actual y que en cuanto a múltiplo de PER el Sabadell no está por encima de Unicaja, Bankinter o CaixaBank «gracias a la presión de la opa del BBVA». «La opa es un factor que está allí y el día que desaparezca, pues la acción empezará a corregir hasta llegar a su valor existente. (…). Desplomarse no se va a desplomar. No solamente no se va a desplomar, hasta puede ser que le quiten el tapón».
Para sostener su argumento, Oliu citó el ejemplo del italiano Banco BPM, que fue objeto de una opa hostil por parte de UniCredit, aunque a finales de julio el banco pilotado por Orcel optó por tirar la toalla ante las duras condiciones impuestas por el Gobierno de Meloni. «Resulta que en estos momentos (la acción de BPM) está un 20% por encima del valor en el que estaba antes de que se retiró la opa», dijo el número uno del Sabadell.
El vallesano se apoya en que la subida de su cotización desde los primeros rumores de la opa (un 84%) está más en línea con la que protagonizan CaixaBank, Bankinter y Unicaja (de media más de un 70%) que la del mismo BBVA (un 50%). Por su parte, el vasco defiende que la correlación entre el precio de su propia acción y la del Sabadell se ha elevado hasta un 0,89 desde el lanzamiento de la opa, teniendo en cuenta una media de 21 sesiones. Este coeficiente cuanto más se acerca 1, más indica una perfecta correlación positiva