A las primeras de cambio y sin solución de repuesto resulta que los ministros o ministras, llámelos usted como quiera, no captan ni votos, ni simpatías, ni “na de na”, así que ni Morant, ni Montero, ni López levantan las encuestas para que Sánchez vea el futuro con ciertos ánimos de repetir en La Moncloa, tal y como sueña desde que sus actuales socios se las hacen pasar canutas y le exprimen hasta dejarle sin aliento y llevarle a la extenuación, derrota, tras derrota parlamentaria.
Es que incluso la que teóricamente lo tenía más fácil, la “mofletitos Morant” está perfectamente estancada en la misma horquilla de votos que tenia el partido socialista s antes de su aterrizaje en la comunidad valenciana. Tan es el fracaso que del cierre de filas inicial impuesto por Ferraz se ha pasado a cuestionar muy mucho a la ministro que no es capaz de sacar ni un voto mas a pesar de la situación de Mazón, abrasado por la dana y su gestión. Alguno plantea incluso el cambio de cara, antes de que sea mas tarde y ya hablan de la delegada del Gobierno como alternativa.
En este ambiente no es de extrañar que desde el PP arredren los ataques y sus primeras espadas toman la iniciativa y así, por ejemplo Feijóo, haya advertido a Pedro Sánchez que «más pronto que tarde nos encontraremos votando, aunque tenga miedo a la libertad de los españoles», y ha tildado al jefe del Ejecutivo como «un presidente zombi». En concreto, en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del partido –Feijóo ha exigido al jefe del Ejecutivo un «debate sobre el estado de la nación» para que «se retrate la soledad de un Gobierno que ya no es tal».
Y como no podía ser de otra forma, la presidenta de Madrid haya aprovechado uno de esos desayunos informativos para destacar las «100 derrotas» de Sánchez en el Congreso de los Diputados donde solo aprueba «lo que sus socios le imponen», leyes «ilegales» o «profundamente dañinas» para España. «Todo por la extrema debilidad de un Gobierno que, según se va empequeñeciendo, se va embruteciendo. Un Gobierno de políticos que no son capaces de buscar el bien común para España y sacar adelante una sola medida juntos».
Y mientras Sánchez huido pensando de China para no se sabe muy bien que, pero es lo que le divierte y distrae y además le permite olvidarse de lo poco que le quieren en España sus compatriotas. ¡Que desagradecidos¡