Como explican desde Hamburg Commercial Bank, «los pedidos de exportación disminuyeron durante el mes y algunas de las empresas encuestadas mencionaron una desaceleración de la demanda francesa. La inestabilidad política en Francia parece estar lastrando cada vez más la actividad económica, con repercusiones para los exportadores españoles. Además, es probable que las medidas proteccionistas de EEUU estén ejerciendo presión adicional en la cartera de pedidos internacionales».
Así, el índice PMI del sector manufacturero español, ajustado estacionalmente, registró 52,1 en octubre y señaló una mejora en el rendimiento por sexto mes consecutivo. De hecho, el índice señaló un ritmo de expansión más rápido y sólido respecto a la lectura de 51,5 registrada en septiembre.
En detalle, el índice se vio respaldado por aumentos simultáneos tanto de la producción como de los nuevos pedidos en octubre. En ambos casos, los ritmos de crecimiento fueron más fuertes que en septiembre, en medio de informes de un entorno empresarial más positivo. No obstante, el aumento de la demanda se debió principalmente a la demanda interna, ya que los nuevos pedidos de exportación disminuyeron al ritmo más rápido en cinco meses. Algunas de las empresas encuestadas comentaron sobre la débil demanda procedente del país vecino francés. Los fuertes aumentos tanto de la producción como de los nuevos pedidos impulsaron a las empresas a intensificar su actividad de compra en octubre, que en general aumentó al ritmo más fuerte desde diciembre de 2024.
Sin embargo, los encuestados señalaron una reducción en sus inventarios de compras, que disminuyeron marginalmente por cuarta vez en los últimos cinco meses. También se registraron retrasos en la entrega de insumos en octubre y los plazos medios de entrega se alargaron en mayor medida que en septiembre. Los encuestados mencionaron ampliamente la falta de existencias disponibles en los almacenes de los proveedores. En octubre, los fabricantes observaron algunas presiones leves en la capacidad y los pedidos pendientes aumentaron por sexto mes consecutivo. Sin embargo, el ritmo de acumulación fue moderado y el más bajo de esta secuencia.
Por otra parte, en muchos casos, las empresas optaron por no reemplazar a los empleados que dejaron sus puestos ni renovar los contratos temporales que vencieron. El resultado neto fue la segunda caída mensual consecutiva del empleo en el sector manufacturero.
En cuanto a los precios, se registró un ligero declive de los costes de los insumos en octubre, la primera contracción de este tipo en cuatro meses. Las empresas encuestadas mencionaron la bajada de precios de diversos productos, incluyendo algunos productos alimenticios, el papel y el acero. En algunos casos, la reducción de los costes se trasladó a los clientes mediante una reducción de los precios de venta. Esto significó que los precios cobrados en general disminuyesen por segundo mes consecutivo, aunque solo marginalmente. Algunas empresas informaron que redujeron los precios de venta para estimular las ventas.
Por último, la confianza en las perspectivas mejoró desde septiembre, ante la esperanza de una mejora general de la demanda y un aumento de las ventas. Algunas empresas también planean aumentar la inversión y mejorar su capacidad de producción durante los próximos doce meses.
