«La disparidad entre los dos sectores se está agrandando. La debilidad industrial general en Europa parece estar afectando cada vez más a España también. Sin embargo, el sector servicios sigue mostrando fortaleza», destacan en Hamburg Commercial Bank.
Añaden que la actividad comercial en el sector servicios de España «sigue siendo alta, lo que las empresas encuestadas atribuyen a unas mejores cifras de ventas. La demanda sigue elevada, respaldada por una situación de pedidos aún sólida. Los pedidos del exterior también han crecido por tercer mes consecutivo, por lo que las perspectivas siguen optimistas y las empresas están intentado contratar más trabajadores para hacer frente a la mayor actividad y evitar que los pedidos pendientes aumenten aún más debido a la alta carga de trabajo».
Así, el índice PMI de actividad comercial del sector servicios español se situó en 56,2 en febrero. Esta cifra fue superior a la de 54,9 registrada en enero y, por lo tanto, representó un ritmo más fuerte de crecimiento de la actividad del sector servicios.
El aumento de la actividad estuvo estrechamente relacionado con un incremento en los niveles de nuevos pedidos. Tras haber aumentado al ritmo más fuerte en más de un año y medio en enero, el crecimiento se ralentizó en febrero, aunque de todas formas se mantuvo elevado y prácticamente en línea con el aumento observado en la actividad.
Los encuestados siguieron informando que la demanda del mercado ha mejorado, tanto en el país como en el extranjero. Los nuevos pedidos de exportación aumentaron, aunque a un ritmo modesto, por tercer mes consecutivo en febrero y en mayor medida que en enero.
Las empresas siguieron estando dispuestas a contratar más personal en febrero, ya que de nuevo se registró un aumento neto en los niveles de dotación de personal y se mantuvo la tendencia de crecimiento mensual continuo que se remonta a octubre de 2022. El ritmo de expansión fue marcado, a pesar de haber disminuido frente a enero, cuando el crecimiento del empleo fue el más fuerte en más de 24 años.
No obstante, las presiones en la capacidad persistieron en el sector y los pedidos pendientes aumentaron a un ritmo sólido, extendiendo el período actual de crecimiento a catorce meses. Una perspectiva positiva también ayudó a impulsar la actividad de contratación.
Las empresas en general siguen mostrándose optimistas de que la actividad comercial será superior en los próximos doce meses frente a los niveles actuales, aunque el sentimiento se moderó desde enero hasta alcanzar su mínima de tres meses.
Se espera ampliamente que el entorno económico mejore en los próximos doce meses y este hecho debería respaldar el aumento de las ventas y la actividad. Las campañas comerciales planificadas deberían garantizar que las empresas también estén bien posicionadas para aprovechar el esperado fortalecimiento de la demanda del mercado.
Mientras tanto, las presiones de los costes continuaron intensificándose en gran medida debido al aumento de los gastos laborales. Los proveedores también se mostraron cada vez más inclinados a aumentar sus precios en febrero. Esto significó que la inflación de los precios pagados en general se acelera hasta alcanzar su nivel más alto registrado por la encuesta en un año.
En consecuencia, las empresas de servicios respondieron aumentando sus precios cobrados en febrero y lo hicieron a una tasa más fuerte que en enero. En general, la inflación aumentó hasta un nivel que estuvo solo ligeramente por debajo de la máxima de seis meses registrada en diciembre de 2024 y, por lo tanto, se mantuvo cómodamente por encima de su tendencia histórica.
«La presión de los precios en el sector servicios de España está aumentando. La inflación de los precios de compra ha alcanzado su máxima en un año y los salarios siguen jugando un papel dominante. Las empresas están intentando repercutir estos aumentos de costes a los clientes siempre que sea posible», comentan en Hamburg Commercial Bank.
«La evolución de los salarios en el sector servicios es mencionada con frecuencia por el Banco Central Europeo (BCE), que probablemente no esté satisfecho con esta tendencia. A juzgar por los datos recientes del índice PMI, también se ha observado la tendencia al alza de los precios de compra en el sector servicios de la zona euro», indican.
La eurozona se asoma al estancamiento
En el mes de febrero el PMI del sector servicios de la zona euro empeoró hasta los 50,6 puntos desde los 51,3 de enero, mientras que el dato manufacturero siguió en contracción, con una lectura de 47,6 puntos, frente a los 46,6 del mes anterior. En este sentido, los autores de la encuesta señalan que el crecimiento de la actividad total de la zona euro se logró sin que los nuevos pedidos registraran una expansión, puesto que la demanda de productos y servicios disminuyó en febrero y las carteras de pedidos por completar siguieron reduciéndose.
Den esta manera la actividad del conjunto del sector privado de la zona euro logró mantener en febrero una expansión «marginal», según refleja el índice PMI compuesto, que volvió a situarse en 50,2 puntos, al borde del umbral que separa el crecimiento de la contracción, en un contexto en el que las empresas siguieron recortando personal y los precios se movieron al alza, según los datos de S&P Global, que señala a España como la economía con mejor evolución entre las analizadas.
