Ante este panorama, el presidente de los nacionalistas vascos, Andoni Ortuzar, y el lehendakari Imanol Pradales, han advertido de que la supervivencia del Ejecutivo central pasa por «cumplir con lo acordado en noviembre. Y punto.», esto es, avanzar en el nuevo acuerdo de autogobierno vasco.
Así lo han expresado las dos caras más visibles del PNV durante la celebración del Alderdi Eguna, la celebración del día del partido hegemónico en Euskadi. «La dirección del partido socialista en Euskadi se está poniendo la venda antes de la herida. No voy a perder ni un minuto en discusiones estériles. Solo voy a recordar lo que pactamos con Sánchez en noviembre», ha señalado Ortuzar.
«Negociar y acordar el autogobierno, tanto en Euskadi como con el Estado, empleando las potencialidades de la disposición primera de la Constitución», ha recitado el líder de la formación jeltzale. Ortuzar ha apuntado a que, una vez han vuelto a poner el foco en los avances en esta materia para mantener su apoyo al presidente Sánchez en el Congreso de los Diputados, han empezado «los movimientos de confusión». «Si no lo hubiéramos hecho, nos hubieran acusado de inmovilismo. Y ahora, antes de empezar a hablar, ya han intentado hacerlo descarrilar», ha incidido.
El presidente del Euskadi Buru Batzar, órgano que rige los designios del partido, ha incidido en que su intención pasa por hablar «con todas las fuerzas democráticas» en el proceso para conseguir un texto «con el mayor consenso posible». «Tenemos una oportunidad histórica. Por primera vez en muchos años, los actores políticos vascos coinciden con los actores políticos mayoritarios en Madrid. Hay que negociar un acuerdo que prospere en Gasteiz y en Madrid», ha recalcado Ortuzar, desoyendo así las voces de Bildu que piden negociar con ellos en exclusiva los términos con los que sentarse ante el Ejecutivo central.
Por su parte, el lehendakari Pradales ha reivindicado la necesidad de un «pacto político» que permita asentar «una relación bilateral con el Estado que incluya el reconocimiento de Euskadi como nación». Pradales ha defendido el modelo del PNV de «construcción nacional y social de Euskadi piedra a piedra», en contraposición con el «modelo populista del todo es posible, aquí y ahora», un modelo, ha dicho, que intenta «vender soluciones mágicas que son imposibles, que hipotecan» el futuro y que se «miraba en el espejo de la Cuba castrista y la Nicaragua sandinista y hoy jalea la Venezuela chavista».