«Queremos hacerlo, – ha afirmado en su platica televisiva- pero tenemos que planteralo al Congreso de los Diputados. La evolución de los precios de los alimentos hoy continúa siendo alta y tenemos que hacer un esfuerzo», un esfuerzo que considera «necesario para nuestros hogares», ha manifestado durante una entrevista concedida a La Hora de La 1.
Sánchez también se ha congratulado de la situación económica de España, sobre todo, tras las últimas revisiones al alza del crecimiento del PIB llevabas a cabo por el Banco de España y el Fondo Monetario Internacional (FMI). El Banco de España ha elevado las previsiones de crecimiento económica para este año y el siguiente, coherente con lo que ha dicho el FMI. Vamos a ser la economía europea que más crezca durante los próximos años en este contexto geopolítico tan complejo».
Desde el punto de vista económico, el presidente ha recalcado, además, que «hemos recuperado el nivel de ingresos previo a la pandemia, a un ritmo superior a economías tan importantes como la alemana o la italiana, demostrando que esta política económica y progresista es más justa y más defensora del interés de la mayoría social».
Respecto a la vivienda, el líder del PSOE ha asegurado que el Estado «se va a implicar». «El Gobierno ha planteado la construcción en cuatro años de más de 180.000 viviendas para gente y familias jóvenes. También gracias al ICO avalamos las entradas para hipotecas. Tenemos que poner en marcha políticas, en algunas comunidades hay rechazo de PP y Vox, como Madrid, para topes al alquiler». No obstante, ha recordado que hay competencias que residen en las comunidades autónomas.
Por otra parte, ha hablado de la no renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), la que ha calificado de «atropello institucional». «La política española merece sosiego, estabilidad y afrontar los desafíos: la vivienda, la dignidad salarial, y en el ámbito institucional la calidad democrática». En este sentido, ha anunciado que «antes de que termine julio presentaremos al Congreso el plan de calidad democrática para ser aprobado».
En cuanto a la situación de su mujer, ha subrayado que ella «no tiene que verse lastimada en su desempeño profesional por que yo sea presidente. Voy a defender la honorabilidad de mi mujer y mi hermano ante una campaña ultraderechista y de una oposición que no tiene nada más».
Y es que Sánchez cree que la «máquina del fango» de prensa y organizaciones ultraderechistas que presentan «denuncias falsas» y son amplificadas por PP y Vox «proviene de la Comunidad de Madrid», que es su «sede social». «Y esto es un problema para la política española».
Asi que, el Gobierno promoverá una reforma para restar al órgano de gobierno de los jueces su potestad de hacer nombramientos, el «incentivo perverso» que a juicio del presidente tiene el PP para no dar su brazo a torcer después de cinco años y medio de bloqueo. El Gobierno, por tanto, se da de plazo hasta «finales de junio» para seguir intentando el acuerdo con el PP. Pero «si en julio continúa con el bloqueo», entonces «las negociaciones se acabaron» con los populares y PSOE y Sumar presentarán una propuesta para desatascar el CGPJ, advirtió. ¿Y cuál sería esa?
Por primera vez, el presidente explicó cuáles son sus intenciones, que no pasan por una rebaja de las mayorías necesarias, un cambio que en su día ya fue censurado por Bruselas pero que le sigue pidiendo su socio minoritario de coalición. Sánchez expuso los contornos de una reforma que se inspira en el plan que presentó hace meses el presidente interino del Consejo, Guilarte. El jefe del Ejecutivo señaló que si se acude al Derecho comparado, en España existe una «particularidad que crea un incentivo perverso» para el PP, y es la facultad que tiene el CGPJ de nombrar magistrados para el Tribunal Supremo o los Tribunales Superiores de Justicia autonómicos. Así que «viendo lo que pasa en otras partes de Europa», su propuesta es que se «revise» esa potestad, haciéndola «más objetiva, más transparente, no politizada».
El problema no es ese que dice Feijóo, en su opinión. Lo «relevante» es «cómo eliminar ese incentivo perverso» que tiene el PP para que no vuelva a producirse «este atropello constitucional» que mantiene bloqueado al órgano de gobierno de los jueces desde hace más de cinco años y medio. Dicho de otra manera, se trataría de restarle atractivo al CGPJ para que el PP, que lo que pretende es «controlar esos nombramientos» judiciales, no tenga alicientes para el bloqueo. «La paradoja es criticar al adversario lo que ellos hacen», «quienes defienden la despolitización [del Poder Judicial]», subrayó, son los partidos políticos que sostienen al Gobierno, y no los populares.
Y eso si, la reforma que planea para propiciar la renovación del CGPJ discurrirá en paralelo al paquete de medidas de regeneración democrática que Sánchez llevará al Congreso en julio. Son, por tanto, dos propuestas legislativas distintas, explicó, y que está trabajando el PSOE con Sumar. ¿En qué consistirá este último? Sánchez recordó que España debe trasponer «y hacer efectiva» la directiva que se aprobó en Bruselas, «con apoyo del PP», y que afecta a la transparencia y la financiación de los medios de comunicación. El presidente avanzó que el plan de mejora de la calidad democrática no solo contendrá medidas relativas a la «pluralidad informativa», sino también concernientes a la «rendición de cuentas y la transparencia».