El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el anteproyecto de la ley antitabaco. Esta norma, que fue rescatada por la ministra de Sanidad –a pesar del rechazo de la ciudadanía y algunos partidos políticos–, equipara los cigarrillos electrónicos a los convencionales y prohíbe fumar y vapear en nuevos espacios. Aunque ha salido adelante, hay una medida que ha sido rechazada por la falta de acuerdo entre los socios de coalición: el empaquetado genérico.
Durante la rueda de prensa, García ha lamentado que «140 personas en nuestro país mueren cada día por esta causa». Además, ha anotado que el 30 % de los tumores están relacionados con el factor de riesgo que tiene que ver con el tabaquismo. En este sentido, la médico ha garantizado que esta «profunda reforma» supondrá un «paso importante en la lucha contra el tabaquismo». Asimismo, ha aseverado que defiende el derecho a la salud y la libertad de respirar aire limpio y «vivir más y mejor» por delante de los intereses comerciales.
Así, el texto final del anteproyecto de la futura ley, a la que le queda aún una segunda vuelta por el Consejo antes de iniciar su andadura parlamentaria y que prohibirá el tabaco en todas sus formas, define nuevos espacios libres de humo. De esta forma, además de terrazas –como ya había adelantado–, estará vetado fumar en las piscinas, campus universitarios, instalaciones deportivas, marquesinas, andenes o vehículos de uso laboral.
El texto, que está dentro de su Plan Integral de Prevención y Control de Tabaquismo 2024-2027, creado por el que fuera titular de la cartera de Sanidad, Illa, establece, tal y como ha anotado la ministra, «un perímetro de seguridad de 15 metros lineales alrededor de las zonas protegidas» como instalaciones sanitarias, centros educativos o deportivos o parques y recintos infantiles. La titular de la cartera de Sanidad también ha afirmado que limitará su publicidad y patrocinio. Debido a esta medida, la promoción de marcas ni dispositivos asociados no podrá aparecer en redes sociales ni escaparates. Tampoco podrá extenderse fuera de dichos establecimientos, ni emplearse cartelería que, por sus características y ubicación, sea visible o percibida desde el exterior de los estancos o tiendas especializadas. Quien incumpla esta medida podrá enfrentarse a multas importantes de hasta 600.000 euros.
Lo que ha quedado excluido es el empaquetado genérico, una medida deseada y pedida por las organizaciones españolas que luchan contra el tabaquismo, pero rechazada por la falta de acuerdo entre los socios de coalición. No obstante, Sanidad o lo da por perdido, ya que deja la puerta abierta para incluirlo durante la tramitación parlamentaria. Otro de los puntos que no ha salido adelante ha sido el del incremento del precio, decisión que han lamentado las organizaciones citadas, puesto que, según han explicado, demuestra eficacia para reducir su prevalencia.