El objetivo es cerrar la vía al despido ‘libre’ pero desdibuja la protección para muchos trabajadores que sufren una vulneración de sus derechos laborales.
En efecto, la formación morada registró a finales de abrir una proposición de «Ley del Estatuto de las Trabajadoras y Trabajadores». Una iniciativa que el Ejecutivo no ha vetado y que espera desde junio vía libre para su debate de toma en consideración en el Pleno. Aún no hay fecha, aunque la previsión es que se produzca en las próximas semanas, a no ser que los grupos mayoritarios de la Mesa del Congreso sigan retrasando su tramitación.
Aunque no es previsible que la proposición supere esta votación, hay que recordar que Podemos tiene poder para trastocar los planes del Gobierno, sobre todo en materia laboral, como demostró cuando tumbó y obligó a rehacer la nueva regulación de los subsidios por desempleo. Por ello, la votación de su iniciativa obligará a los PSOE y, en especial, a Sumar, así como a los aliados de la coalición, a retratarse en un aspecto clave que quedó pendiente en la reforma laboral de 2021: la regulación del despido. Pero la formación que lidera Belarra va ahora mucho más allá de derogar los cambios introducidos por el PP en 2012 que reducían de 45 a 33 días por año en la indemnización por despido improcedente. Lo que plantea es eliminar el propio despido improcedente. Sin embargo, al hacerlo rompe el principio de equilibrio entre la justificación del despido y definir las líneas rojas de vulneración de los derechos de los trabajadores que las últimas reformas han respetado.
Podemos sigue una estrategia que similar a la que aplicó en su etapa de Gobierno aumentar los supuestos de nulidad del despido. Una estrategia, que ha provocado un repunte de la judicialización y que se ha visto acompañada de numerosos errores de técnica legislativa que se han extendido hasta la presente Legislatura, como ocurrió en el caso de la Ley de Paridad. Ahora pretenden llevar esta filosofía a su máxima expresión.