Además, el 47% de los encuestados creen que la actividad irá en ascenso de aquí al próximo año, mientras que el 30% apunta a que se mantendrá igual. En términos de crecimiento, la opinión media de los encuestados se traduce en una previsión de incremento del PIB del 1,9% para 2023 (cinco décimas más que en la última encuesta) y del 2% para 2024.
Foto: Foto: iStock.
Desde PwC han concluido que los expertos no esperan un decaimiento económico inmediato por la subida de tipos. Este optimismo se debe en parte a la buena situación financiera de las empresas, que se mantendrá inalterable en los próximos meses, según el 73% de los expertos. En cuanto a las exportaciones, el 90% de los panelistas esperan que aumenten o permanezcan estables en los próximos seis meses, mientras que para la inversión productiva, esta opinión es refrendada por más del 80%.
En cambio, las familias atraviesan un momento menos optimista. De hecho, solo el 22% de los entrevistados creen que se encuentran en una buena situación y la mayoría (74%) espera que se mantenga igual de cara al próximo trimestre. De ahí que los datos de PwC señalen que la demanda de vivienda seguirá cayendo en los próximos seis meses (así lo afirman el 67% de los encuestados). Sin embargo, parece que el consumo resistirá mejor, como respaldan el 59,8% de los encuestados. En cuanto a la inflación, los expertos estiman que, a finales de 2023, se situará en torno al 3,3%, y, para junio de 2024, en el 2,9%.
Los retos de la presidencia de la UE
PwC también ha preguntado a los expertos sobre los principales retos económicos de la presidencia española de la UE. La primera conclusión (apoyada por el 80%) es que los encuestados «consideran prioritario» que los países de la UE cierren un acuerdo definitivo sobre el Pacto de Estabilidad y Crecimiento planteado por la Comisión Europea. Cuando se les pregunta sobre las políticas que deben ser vitales para la UE, la inversión en infraestructuras digitales es vista como la más urgente (76,5%), seguida de la seguridad y defensa (45,1%). Otros aspectos relevantes para los expertos y miembros del mundo empresarial son los tratados durante la presidencia española.
Concretamente, el 64,7% asegura que es prioritario que se alcance un pacto sobre políticas de inmigración, y el 51,5% considera lo propio sobre la regulación del precio del mercado eléctrico. Además, el 92% de los encuestados están parcial o totalmente de acuerdo con que el liderazgo español de la UE debería valer para que el país asuma un protagonismo elevado en la reactivación de las relaciones de con América Latina y se ratifique el acuerdo con Mercosur. Sobre las relaciones de la UE, China surge como aliado favorito para el 66,7% de los expertos, por encima de los que prefieren a Estados Unidos (56,9%) e India, que ocupa el tercer lugar. Por otro lado, el país que menos adhesiones provoca (un 30,4% de las respuestas que lo consideran muy prioritario), es el Reino Unido. Esta opinión podría venir provocada por las dificultades comerciales y del mercado laboral que ha generado el Brexit.