Además, le ha impuesto una multa de más de 2 millones de euros y el pago de 568.413 euros a Hacienda.
El propio Rato se ha acercado a la sede de la Audiencia Provincial de Madrid a recoger su sentencia, de más de 1.100 páginas, dado que la notificación era personal y no se le puede sustituir. A la llegada, tras ser preguntado qué espera de esa resolución, solo ha respondido a los periodistas con un «que lo pasen ustedes bien».
Cabe recordar que en su escrito de acusación, la fiscal anticorrupción Lorente pedía más de 70 años de cárcel para Rato por haber defraudado al fisco presuntamente 8,5 millones de euros. Indicaba que el exministro habría mantenido desde 1999 un patrimonio oculto a la Hacienda Pública a través de diversas sociedades con las que habría realizado continuas actividades de inversión financiera mediante cuentas bancarias en Bahamas, Suiza, Mónaco, Luxemburgo y Reino Unido, entre otros lugares.
El análisis de la documentación intervenida, señalaba la Fiscalía, permitió identificar incrementos patrimoniales no justificados entre 2005 y 2015 por un importe total de 15,6 millones de euros, además de rendimientos de capital mobiliario en el exterior tampoco declarados a Hacienda. A la luz de tal documentación, y según el informe de 7 de julio de 2020 efectuado por la Unidad de la AEAT adscrita a la Fiscalía Anticorrupción, concluyeron que resultaron cuotas defraudadas por importe de 7,4 millones de euros. La Fiscalía recordaba además que Rato se acogió en noviembre de 2012 a la amnistía fiscal y apuntaba que omitió cualquier referencia a varias sociedades que poseía, declarando así un patrimonio en el exterior de 115.333 euros y pagando a la Hacienda española 11.533.
Anticorrupción indicaba al respecto que Rato, «lejos de haber regularizado ni administrativa ni, menos aún, penalmente (su patrimonio), utilizó en realidad la declaración tributaria especial como un vehículo de blanqueamiento o limpieza de las ilícitas cuotas defraudadas que arrastraba desde hacía años por su patrimonio exterior».