Aunque el combustible sostenible de aviación (SAF, por sus siglas en inglés) es un factor clave para la descarbonización de la aviación, sólo representa una pequeña fracción del uso actual de combustible de aviación en todo el mundo. Con este acuerdo, la compañía multienergética facilitará a Ryanair el acceso a un máximo de 155.000 toneladas de SAF entre 2025 y 2030, equivalente a más de 28.000 vuelos de Dublín a Madrid, lo que permitirá una reducción aproximada de 490.000 toneladas de emisiones de CO2.
En este sentido, Repsol es pionera en España en la fabricación de combustibles renovables para todos los sectores del transporte, incluyendo la aviación. Con la producción de este tipo de combustibles en sus complejos industriales Repsol se ha anticipado a las diferentes medidas que las instituciones comunitarias han establecido para fomentar el uso de los combustibles sostenibles de aviación.
Además, la compañía multienergética pondrá en marcha a finales de este año la primera planta de biocombustibles avanzados de España, en Cartagena (Región de Murcia), que producirá 250.000 toneladas de combustibles renovables a partir de residuos, dentro del objetivo de la compañía de alcanzar la capacidad de producción de 1,3 millones de toneladas de combustibles renovables en 2025 y más de 2 millones en 2030, liderando así este mercado en la Península Ibérica y avanzando decididamente hacia el objetivo de cero emisiones netas en 2050.