La presidenta de Santander, ha criticado el impuesto temporal a la banca diseñado por el Gobierno al considerar que las entidades financieras deberán asumir una carga fiscal muy por encima de las empresas de otros sectores. “Pagamos más impuestos, pero que paguen todos. Pagamos cinco puntos más que otros sectores. El sector bancario ha estado perdiendo dinero durante muchos años y en España no se cubre el coste del capital», ha expresado Botín.
Santander calcula que deberá abonar entre 220 y 230 millones de euros por el gravamen temporal que decidió imponer el Ejecutivo a cargo de los ejercicios 2022 y 2023 al considerar que los bancos obtendrán beneficios extraordinarios debido a la acelerada subida de tipos de interés por el BCE. Esta tasa impone un tipo del 4,8% sobre la suma de margen de intereses y comisiones para los bancos que en 2019 (el año previo a la pandemia) obtuvieran más de 800 millones entre ambos conceptos. El Ejecutivo espera recaudar 1.500 millones en cada uno de los dos años en los que estará vigente.
Además, la presidenta de Santander avanzó que la entidad está estudiando presentar un recurso ante los tribunales. “Estamos estudiando si lo recurrimos porque es nuestra obligación”, apuntó.
Igualmente, ha valorado que un nuevo gravamen sobre el sector bancario contraerá la oferta de crédito, ya que el sector contará con menos capital para inyectar en la economía. “Un impuesto que se aplica sobre ingresos y además a un sector como el bancario tiene un efecto negativo. Los bancos concedemos crédito y lo hacemos en función del capital que disponemos. Si pagamos impuestos habrá menos capital para dar crédito o menos capital para repartir entre los accionistas”, ha valorado.
La presidenta de Santander también advirtió que iniciativas como poner un tope a los precios de las hipotecas, como se ha sugerido desde el Gobierno, podría expulsar del mercado a los clientes más vulnerables. “Un país logra más cuando hay consensos y es lo que queremos hacer desde el sector financiero y empresarial. El caso del Código de Buenas Prácticas en las hipotecas es uno de ellos, pero puede haber otros. Hay que bien las consecuencias de los acuerdos para todos los colectivos. En hipotecas sería un error poner unas condiciones que expulsen del mercado a los más vulnerables”,
Beneficio record
Banco Santander obtuvo un beneficio atribuido récord de 9.605 millones de euros en 2022, un 18% más en euros corrientes con respecto a 2021, gracias al fuerte crecimiento de la actividad comercial, una buena calidad de los activos y el control de costes. Los impuestos sobre beneficios en el año alcanzaron los 4.486 millones de euros, lo que supone una tasa fiscal efectiva del 29%. En el cuarto trimestre estanco, el beneficio atribuido fue de 2.289 millones de euros, un 1% más en euros corrientes que en el mismo periodo del año anterior. El número de clientes siguió creciendo con siete millones más en los últimos doce meses, hasta los 160 millones. Los recursos de clientes aumentaron un 6%, hasta los 1,15 billones de euros, gracias al buen crecimiento de los depósitos (+9%), mientras que los créditos aumentaron un 5%, con las hipotecas y el crédito al consumo creciendo un 7%. La cartera crediticia se mantiene muy diversificada tanto por líneas de negocio como por geografías, con un 65% del crédito con garantía real.
El foco de Santander en la vinculación de sus clientes y la innovación digital ha permitido al banco situarse entre los tres primeros puestos en satisfacción de cliente en ocho países, según los rankings de recomendación de Net Promoter Score (NPS). El uso de servicios digitales siguió creciendo y un 80% de las operaciones se realizaron por canales digitales, mientras que el 55% de las ventas se hicieron en la web o el móvil. El aumento de la actividad de los clientes, así como el incremento de los tipos de interés en Reino Unido, la eurozona, Polonia y otras geografías, favoreció un aumento del 9% en el margen de intereses (+16% en euros corrientes), con un crecimiento especialmente alto en Reino Unido (+13%), Polonia (+99%) y México (+13%). El efecto de la subida de tipos sobre el margen de intereses aún no se ha reflejado plenamente en España, Portugal y Estados Unidos. Con motivo de las subidas de tipos de interés, Santander podría obtener entre 2.000 y 2.500 millones de euros adicionales de margen de intereses en los próximos 12 meses, de acuerdo con las previsiones actuales del precio del dinero. Los ingresos por comisiones aumentaron el 7% (+12% en euros corrientes), gracias a los mayores volúmenes y la mejora de la actividad. La facturación derivada de operaciones con tarjeta y datáfonos aumentó un 14% y un 21%, respectivamente.
El margen de intereses y los ingresos por comisiones representaron el 97% de los ingresos del grupo, lo que refleja la calidad de sus resultados. Con ello, los ingresos totales crecieron un 6% (+12% en euros corrientes), hasta los 52.154 millones de euros, en línea con el objetivo de crecimiento de ingresos de en torno al 5%. Esto, junto al buen control de costes, dio como resultado un beneficio antes de provisiones (margen neto) de 28.251 millones, un 5% más (+13% en euros corrientes). El fuerte repunte de la inflación provocó un aumento general de los costes (+7%), si bien, en términos reales cayeron un 5% gracias a la mejora de la productividad y la colaboración internacional entre mercados y negocios.
• La escala, la diversificación y la orientación comercial del grupo dan como resultado un año sólido, con un aumento de siete millones en el número de clientes, hasta los 160 millones; un incremento de ingresos del 12%, hasta los 52.154 millones de euros, y un aumento del beneficio antes de provisiones (margen neto) del 13%, hasta los 28.251 millones. • Estos resultados se lograron gracias a una mayor colaboración internacional entre mercados y negocios. Las unidades globales lograron buenos resultados, especialmente CIB, que aumentó su beneficio un 31% en euros constantes (es decir, sin fluctuaciones de divisa). • La diversificación sigue siendo clave para garantizar un crecimiento constante y rentable, con un aumento en la actividad de los clientes que ayuda a mejorar el resultado de Europa, Sudamérica y Digital Consumer Bank. Por su parte, Norteamérica continúa generando buena rentabilidad pese a la normalización de las provisiones. • La ratio de eficiencia mejoró en el año hasta el 45,8%, pese al impacto de la inflación en los costes. En términos reales, los costes bajaron un 5% en euros constantes gracias a las mejoras de productividad del grupo. • El coste del riesgo (0,99%) estuvo en línea con el objetivo. Las dotaciones crecieron un 31% en euros constantes con respecto a 2021, cuando el banco liberó provisiones en algunos países. Santander ha hecho dotaciones adicionales por la actualización de las previsiones macroeconómicas, reflejo de su prudencia dada la incertidumbre económica. • El balance del grupo se ha mantenido sólido, con una ratio de capital CET1 fully loaded por encima del 12% al cierre de año, en línea con su objetivo. El consejo mantiene para 2022 su intención de retribuir a los accionistas con en torno al 40% del beneficio ordinario, distribuido aproximadamente a partes iguales entre dividendos en efectivo y recompras de acciones1 . • En 2023, el banco espera crecer de forma rentable, con un objetivo de incremento de los ingresos a doble dígito; un RoTE por encima del 15%; un coste de riesgo por debajo del 1,2%; una ratio de eficiencia del 44-45%, y un CET1 por encima del 12%. Todo ello, de acuerdo con el consenso macroeconómico actual.
Así, la ratio de eficiencia del grupo cerró en el 45,8% en 2022 (con una mejora de 0,4 puntos porcentuales frente a 2021), lo que sitúa a Santander entre las entidades más eficientes de sus comparables. El balance se ha mantenido sólido, con la ratio de morosidad en el 3,08%, tras bajar ocho puntos básicos frente al cierre de 2021 gracias a la buena evolución de Europa y Digital Consumer Bank, mientras que la ratio de cobertura se situó en el 68%. El coste del riesgo, es decir, lo que el banco provisiona en función de la pérdida esperada de la cartera, aumentó 22 puntos básicos en el año, hasta el 0,99%, en línea con el objetivo, debido al incremento de las dotaciones (+31%) frente a 2021, cuando el banco liberó dotaciones en algunos países. Santander ha hecho dotaciones adicionales en 2022 por la actualización de las previsiones macroeconómicas, reflejo de su prudencia dada la incertidumbre económica. Estos sólidos resultados han permitido mejorar las métricas de rentabilidad del banco, con un retorno sobre el capital tangible (RoTE) del 13,4%, logrando el objetivo para 2022 (por encima del 13%), y un beneficio por acción (BPA) de 0,539 euros, un 23% más. El valor contable tangible (TNAV) por acción en 2022 se situó en 4,26 euros. El TNAV por acción más el dividendo en efectivo por acción, una métrica clave para los inversores que muestra la creación de valor, creció un 6% en los últimos doce meses. La ratio de capital CET1 fully loaded se situó en el 12,04%, en línea con los objetivos de capital del grupo, tras mantener una fuerte generación orgánica de capital Santander completó en 2022 la adquisición de la participación minoritaria en Santander Consumer USA y del bróker estadounidense de renta fija Amherst Pierpont, de acuerdo con su estrategia de orientación al cliente y de crecer de forma rentable en Estados Unidos.
El banco también ha anunciado su intención de adquirir las acciones de Santander México que aún no controla, que representan aproximadamente el 3,76% del capital de esa filial. Santander ha cumplido sus compromisos de ingresos, rentabilidad y solvencia para el conjunto del año y ha mejorado la ratio de eficiencia pese a las presiones inflacionistas. En 2023, la entidad espera crecer de forma rentable y lograr un crecimiento de ingresos a doble dígito, una ratio de eficiencia del 44-45%, un coste del riesgo por debajo del 1,2%, una ratio CET1 fully loaded por encima del 12% y un RoTE por encima del 15%. De acuerdo con la política de retribución al accionista para 2022, el consejo de administración aprobó el primer dividendo a cuenta de los resultados del ejercicio, con dos componentes: un pago en efectivo de 5,83 céntimos de euros por acción, pagado el pasado 2 de noviembre y superior en un 20% al pago equivalente de 2021, y un programa de recompra de acciones de hasta 979 millones de euros, que se completó el 31 de enero de 2023.
Con ello, la remuneración total del primer pago a cargo de los resultados de 2022 estuvo por encima de los 1.900 millones de euros (un 16% más que el de 2021). Si se aplica la misma ratio de reparto de dividendo en el segundo pago contra los resultados de 20222, el dividendo en efectivo por acción total de 2022 aumentaría el 16%2 en comparación con el año anterior y la rentabilidad equivalente del dividendo más la recompra de acciones estaría por encima del 8%3 . En los dos últimos años,
Santander ha recomprado el 5% de sus títulos con los programas de recompra de acciones. Santander tiene el firme compromiso de apoyar la transición hacia una economía verde. Es uno de los líderes mundiales en financiación de proyectos de energía renovable y sigue apoyando a sus clientes para que avancen en la transición verde, por ejemplo, otorgando 4.800 millones de euros de financiación para vehículos eléctricos en 2022. Santander ha movilizado 91.000 millones en financiación verde entre 2019 y 2022 y su objetivo es alcanzar los 120.000 millones de euros para 2025 y los 220.000 millones de euros para 2030. Además, Santander ha establecido tres nuevos objetivos intermedios para descarbonizar sus carteras hasta 2030, que se suman a los objetivos ya anunciados en 2021: reducción del 29% de las emisiones absolutas financiadas en el sector energético; reducción del 33% de la intensidad de las emisiones en el sector de la aviación, y reducción del 32% en la intensidad de las emisiones del sector del acero. Además, Santander ha facilitado el acceso a servicios financieros a más de 10 millones de personas desde 2019, de modo que ha superado su objetivo para 2025 con tres años de antelación. A lo largo de 2022, ha concedido 900 millones por medio de sus programas de microcréditos.