Roig ha anunciado una posible fuga de empresas o una «ralentización de las inversiones» por parte de las empresas con las consecuencias devastadoras que puede tener para la economía más aún en el viniente periodo de recesión ya que son los empresarios «quienes traen riqueza a este país». Y es que lo que viene a decir es que los empresarios, como Roma, no paga a traidores: «Las empresas necesitan tranquilidad y no que nos pongan palos en las ruedas», en alusión al impuesto a las grandes fortunas. De hecho, ha advertido con un ejemplo de que empresas extranjeras podrían «ralentizar la inversión» en España como él mismo haría en Portugal, pese a estar en expansión, si el clima político que vive España se estuviera dando en Portugal.
«Y eso no puede ser», ha añadido, valorando que lo primero es «dar tranquilidad» al país y «después ya que salga el que democráticamente más se crea, pero dentro de un marco de estabilidad que es lo que necesitamos».
En el acto QuieroCorredor que ha reunido a 1.800 empresarios, Roig también ha denunciado que se «está consiguiendo una división entre los españoles que no es nada buena» y si se sigue por esta senda «a todo el mundo le va a ir a peor». En la misma línea el presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios, Vicente Boluda, ha lamentado que se cree división entre «trabajadores y empresarios». Por ello, ha pedido a la clase política española tranquilidad y «que no ponga palos en las ruedas», al tiempo que ha advertido de que se está produciendo una división entre españoles «que no es nada buena».
En su opinión, si el clima político que se vive en España se estuviese dando en Portugal, donde la compañía valenciana está en claro proceso de expansión, Mercadona «ralentizaría las inversiones». «Las empresas, los trabajadores necesitamos tranquilidad, si este mismo problema que tenemos en España lo tuviéramos en Portugal, nosotros, que estamos en plena expansión, ralentizaríamos las inversiones. Y eso no puede ser, tenemos que dar tranquilidad al país y tranquilidad a los españoles».
Mucho más duro se ha mostrado el presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Boluda, que ha dicho que el pacto de gobierno para facilitar la investidura de Sánchez «lleva a una deriva destructiva y de división».
El presidente de los empresarios valencianos ha rechazado los acuerdos de investidura que se debaten en la Cámara Baja, y ha apuntado sobre ellos que «atentan contra los pilares básicos de nuestro modelo de estado de derecho, contra la igualdad de todos los españoles ante la ley y contra el respeto a la división de poderes».