Este movimiento pone fin a años de tensiones y confirma el golpe de timón de Ryanair en su particular pugna con las agencias de viajes online (OTA, por sus siglas en inglés) a las que viene acusando de comercializar sus servicios sin permiso y engañar al consumidor con sobrecostes.
Según explica la aerolínea en un comunicado emitido este martes, este acuerdo también garantizará que los clientes que reserven en estas plataformas sus vuelos «tengan acceso a su cuenta myRyanair sin necesidad de completar la verificación de cliente de Ryanair», clave para garantizar que los usuarios reciban directamente las actualizaciones sobre sus vuelos. Todo ello, aseguran desde Dublín, «con total transparencia en los precios de los productos».
Con este acuerdo, Ryanair sigue tejiendo una red de alianzas comerciales en aras de garantizar que las plataformas no cobren recargo a sus clientes. El grupo estadounidense se suma así a una extensa lista de agencias ‘de confianza’ para la low-cost donde ya conviven otras como loveholidays, lastminute, Travelfusion, Paxport, Kiwi, On the Beach, TUI, Viajes El Corte Inglés y Expedia. Al ampliar su red de socios, refuerza el control de las tarifas que ofrecen terceros y obtiene acceso directo a datos de contacto y pago de los pasajeros, como el correo electrónico, para informar de posibles cambios en los vuelos.