El objetivo, según ha explicado Sánchez, es construir una media de 15.000 viviendas de este tipo al año y hasta alcanzar las 20.000 unidades en una década. «Estamos ante un cambio de paradigma que responde a tres objetivos: construir más y mejores viviendas, construir más rápido y hacer que los precios sean más asequibles para la clase media trabajadora de nuestro país», ha afirmado durante su intervención en la Feria del sector de la construcción Rebuild, que se celebra en Madrid. «Es necesario avanzar con determinación hacia un modelo industrializado de la construcción, donde la tecnología y la digitalización estén en el centro», ha añadido Sánchez.
La sede del programa se situará en la zona de actividades logísticas del Puerto de Valencia. El Gobierno pretende con este gesto mostrar su compromiso con la reconstrucción económica de la zona más afectada por la DANA del pasado mes de octubre. En este marco, se creará una Ciudad de la Industrialización de la Construcción que se ubicará en la Zona de Actividades Logísticas del Puerto de Valencia, en suelo titularidad de SEPES. Según ha detallado Sánchez, el PERTE se articulará en torno a tres grandes objetivos: aumentar la capacidad productiva, mejorar la eficiencia y sostenibilidad de la construcción y aumentar el número de mujeres y jóvenes en el sector.
«Debemos muchos a los trabajadores de la paleta que levantaron con sus manos la España que hoy conocemos. Son parte de nuestra memoria, pero la construcción del mañana tiene que dignificar aún más el empleo y hacerlo atractivo para nuestros jóvenes. No se trata de menos cemento y más ordenador, sino de cementos sostenibles y nuevas tecnologías para construir casas más asequibles», ha sostenido Sánchez.
En el primer caso, el Gobierno quiere apoyar el crecimiento de las pequeñas y medianas empresas que apuesten por la industrialización mediante la financiación de sus proyectos. En segundo lugar, el Ejecutivo busca reducir los plazos de ejecución entre un 20% y un 60%, así como que las casas se adapten mejor a las inclemencias climáticas. Por último, el Ejecutivo aspira a aumentar el porcentaje de trabajadoras, que apenas alcanza el 11% de la plantilla del sector. El presidente también ha aprovechado su intervención para defender la Ley de Vivienda que entró en vigor hace casi dos años y cuyos resultados «ofrecen un horizonte de esperanza». Además, ha hecho un llamamiento a ayuntamientos y comunidades autónomas para que no la «ignoren ni la boicoteen» y al resto de partidos políticos para alcanzar un acuerdo que permita sacar adelante la reforma de la Ley del Suelo.
Este PERTE forma parte del paquete de 12 medidas para la vivienda que Sánchez dio a conocer en enero, con el que se busca afrontar la emergencia habitacional del país. Además, tanto el presidente como la ministra de Vivienda, Rodríguez, han destacado en Rebuild que la inversión en políticas de vivienda se ha multiplicado en la etapa de Sánchez en Moncloa. «Hemos invertido 20.400 millones de euros, buena parte de ellos proceden de los fondos europeos que hoy están permitiendo la reactivación de este sector», ha señalado Rodríguez.