Sánchez hizo este anuncio en una rueda de prensa junto al primer ministro de Vietnam, Pham Minh Chinh, en el primer viaje de un presidente español al país. El jefe del Ejecutivo mantuvo una reunión en Hanoi con el primer ministro y al término de la cual ambos firmaron una declaración conjunta entre España y Vietnam y cinco acuerdos en materia de consultas políticas, agricultura y pesca, escuelas diplomáticas, cultura y deporte y apoyo a la inversión española.
En el encuentro, el presidente felicitó a las autoridades y al pueblo de Vietnam por el 50 aniversario de su reunificación y del final de la guerra, subrayando que «España valora enormemente los avances y el desarrollo alcanzados por Vietnam en los últimos años, y desea respaldar y acompañar ese progreso».
Sánchez destacó que ambas economías «se encuentran entre las más dinámicas y con mejor desempeño a escala global, por lo que debemos aprovechar las oportunidades que esta coyuntura nos brinda» y añadió que «los acuerdos que hoy firmamos van a impulsar nuestra relación bilateral, con el objetivo de avanzar hacia una relación estratégica integral», un propósito recogido en la declaración conjunta firmada por el presidente y el primer ministro.
«La empresa española tiene mucho interés en ampliar su presencia en Vietnam en sectores relevantes en los que somos referencia mundial, como el de las infraestructuras ferroviarias. Esperamos que nuestro saber hacer pueda contribuir a la modernización de la movilidad que está diseñando Vietnam», destacó Sánchez. El presidente puso el acento en el constante crecimiento económico de Vietnam en el entorno del 6% anual en las últimas dos décadas, “un dato impresionante que llevará a Vietnam -estoy convencido- a convertirse en un país de renta alta en 2050. En ese camino hacia la prosperidad, España puede y quiere acompañaros”.
Sánchez subrayó también el «compromiso decidido» de ambos países con el multilateralismo «para hacer frente a los grandes retos de nuestro tiempo, y somos, además, firmes defensores del libre comercio para lograr el desarrollo y la prosperidad de nuestros pueblos. A nadie le interesa una guerra comercial; en una guerra comercial todos perdemos, y sobre todo quien pierde son los trabajadores y la clase media de la sociedad”.