Los expertos prevén una caída del margen de intereses especialmente en Europa y Norteamérica, que compensará con una mayor volumen de negocio, y pronostican mayores saneamientos en Brasil, en Reino Unido y en su negocio de financiación de autos en Estados Unidos.
Por vez primera el banco se ha autoimpuesto distribuir la solvencia restante a partir de un umbral de CET1, como la mayoría de entidades. En su caso tiene por objetivo interno mantener el ratio en una horquilla de entre el 12 y 13%, y en septiembre se situará en el 13,57% conforme a los cálculos del consenso de analistas.
Los expertos esperan que su rentabilidad sobre recursos propios (ROE) se sitúe en el 13,57% y la calculada sobre patrimonio tangible o RoTE en el 15,88%, ligeramente inferior al 13,70 y 16,90% que contabilizó en las cuentas del primer semestre del ejercicio. La ratio de eficiencia, según sus cálculos, mejorará desde un 41,90 al 41,60% en la comparativa interanual.
El grupo cántabro selló en junio un semestre récord, con un beneficio atribuido de 6.833 millones, que aumentó un 13% interanual y batió las expectativas del mercado. Su impulso se apoyó en un aumento del 3% en los ingresos por comisiones, efecto de la buena marcha comercial, y contrarrestó la leve caída del margen de intereses por efecto del descenso de tipos. En negocio, el volumen de recursos de clientes creció un 6% en euros constantes y un 1% en la cartera de préstamos.
