En ambos casos, el crecimiento del empleo se ha ralentizado y las estimaciones preliminares de referencia mostraron revisiones a la baja similares en el empleo total (-911 000). La tasa de desempleo también ha aumentado hasta el 4,3 %, la misma cifra que en septiembre de 2024. Sin embargo, podemos observar más diferencias que similitudes. En la reunión de septiembre de 2024, el crecimiento medio del empleo se había ralentizado desde los 243 000 puestos de trabajo a principios de año hasta los 116 000 en agosto de 2024. Por el contrario, en 2025, el crecimiento medio del empleo se ha desplomado de 232 000 en enero a solo 29 000 en agosto. Un ritmo mensual de 29 000 es más lento que cualquier otro registrado en expansiones anteriores. Otros indicadores del mercado laboral, como las solicitudes continuadas de prestaciones por desempleo y las ofertas de empleo, también son mucho más débiles en 2025. Mientras tanto, la media trimestral del IPC subyacente se sitúa en el 0,3 %, frente al 0,2 % antes de la reunión de septiembre de 2024, debido, al menos en parte, a los aranceles.
A la luz de estos acontecimientos, sigue abierta la posibilidad de una nueva intervención expansiva de la Reserva Federal, incluida una bajada de los tipos de interés de 50 puntos básicos.