Los casos de Serhs y Duro Felguera son los primeros. En concreto, Serhsl ha alcanzado un acuerdo paralelo al plan de reestructuración global que afectaba a la banca y al fondo de deuda alternativa BeSpoke.
El segundo plan tras una prórroga extraordinaria del Juzgado de lo Mercantil número 3 de Oviedo ha propuesto una nueva estructura de financiación por parte de la Sepi, en la que el tramo participativo desaparece y se incluyen tres nuevas fechas de vencimientos, dos de ellas fuera del límite previsto ahora (año 2032 y 2035).
En cualquier caso, para que el deseo del organismo público se haya llevado a cabo ha sido necesario lograr el plácet de Bruselas
Un plazo más amplio es un balón de oxígeno para algunas empresas que se ven incapaces de hacer frente a la devolución de la ayuda en los términos firmados en 2021 y 2022. La Sepi se ha mostrado dispuesta a este cambio tras rechazar otras peticiones, como aplicar algún tipo de quita o capitalizar la deuda del tramo participativo para pasar a ser accionista de estas empresas en apuros. Otra opción a la que se ha abierto ha sido rebajar el tipo de interés que cobra a las compañías financiadas. El malestar por esta situación lo ha hecho público, por ejemplo, Air Europa, la primera empresa en ser rescatada por el Fasee.
La situación apremia a la SEPI en otros rescates Entre las empresas que en el mercado apuntan está Imasa, que recibió 35 millones de euros y está tratando de elaborar un plan de reestructuración parecido al de Duro Felguera por sus similitudes como empresa asturiana y ‘epecista’. Otras empresas como Losán y Meeting Point, que recibieron 35 y 31 millones, respectivamente han entrado también en preconcurso durante el último año y han acordado con la SEPI demoras en el calendario inicial, si bien se desconoce en estos casos las nuevas fechas acordadas.
El estado actual de concesión y recuperación de las ayudas desplegadas marca que el organismo público debe ingresar 840,70 millones de euros en 2026 y otros 632,54 millones en 2028, según las últimas cuentas del Fasee depositadas ante el IGAE. Se trata de ayudas correspondientes a empresas como Tubos Reunidos o Técnicas Reunidas, que deben abonar 126 y 175 millones, respectivamente, en un solo pago en este horizonte. El motivo es que los préstamos firmados son formato bullet, es decir, se amortiza el crédito en un único pago, mientras que antes se abonan solo los intereses generados.
Otras compañías rescatadas, Volotea, y Air Nostrum, han renegociado y fijado nuevos plazos para sus rescates de 200 y 111 millones, respectivamente. La aerolínea que preside Carlos Bertomeu y que opera bajo la franquicia Iberia Regional logró a principios de este año modificar los plazos y fijar 2028 como nueva fecha, mientras que la compañía que dirige Lázaro Ros estiró todavía más los plazos y acordó fijar 2029 como plazo último de devolución, convirtiéndose así en la empresa que más dinero debe desembolsar en dicho ejercicio.