Sánchez, por su parte, insistió en que actuará con “tolerancia cero” y recriminó al PP la “privatización” de los servicios públicos, que “otro tipo de corrupción”.
En este ambiente, la oposición centró la sesión de control al Gobierno en el nuevo informe de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, que retrata en sus 227 páginas una trama liderada por Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE, que habría cobrado comisiones del 2% durante cerca de una década por los contratos amañados de obra pública que se suscribieron con Acciona. Según los cálculos de los agentes, la organización se habría podido embolsar siete millones de euros.
Feijóo se lanzó directamente contra Sánchez y, tras relatar una suerte de parálisis en la que estaría instalada el Congreso, le preguntó irónicamente si para “sacar algo adelante” en las Cortes “hay que reservarle una mordida del 2% al PSOE”.
“Tolerancia cero frente a la corrupción y no cero respuestas frente a la corrupción, que es lo que ustedes hacen cuando les afectan estos casos; mire Almería”, le replicó Sánchez, quien rehusó ahondar en el ‘caso Cerdán’ en el resto de la interpelación. El PP de Andalucía ha suspendido de militancia al presidente la Diputación de Almería, García, al vicepresidente, Giménez, y el alcalde de Fines, Sánchez, por presuntamente cobrar comisiones ilegales con contratos de material sanitario.
Feijóo redobló su presión frente a un Sánchez que “gobierna sin el Parlamento, ocupa las instituciones del Estado y dicta sentencias” para “protegerse en el poder” del ‘caso Cerdán’.
El líder de la oposición relató varios de los hechos recogidos por la UCO, como el “enchufe” de la mujer de Cerdán en la empresa de Koldo García, asesor del exministro Ábalos, y también cargó contra el presidente del Gobierno por la reunión de Hernando, exdirector adjunto del Gabinete de la Presidencia, con Díez, ‘fontanera’ del PSOE investigada por liderar una operación de desprestigio contra jueces, fiscales y agentes de la Guardia Civil.
“En definitiva, la cloaca es Ferraz y usted la ha llevado a la Moncloa. Su compañero de coche en las primarias, el señor Cerdán, empezó a robar en Navarra y siguió en España en cuanto usted llegó a la Moncloa. ¡Su moción de censura no fue contra la corrupción, fue para la corrupción de su cuadrilla!”, concluyó Feijóo, quien arrancó una fuerte ovación en la bancada del PP.
Sánchez rechazó “clases de ejemplaridad” de quien lleva “un año aplaudiendo” a Mazón, presidente en funciones de la Generalitat Valenciana que ha dimitido por su gestión en la trágica dana que registró 229 fallecidos en Valencia, e insistió en que el PP protagoniza “la corrupción de privatizar servicios públicos a costa de la clase media trabajadora”.
Entre los reproches por los casos de corrupción, Feijóo pidió a todos los socios del PSOE que le aclaren “si la siguiente legislatura” puede transcurrir sin Presupuestos Generales del Estado igual que esta, y tildó a Sánchez de “insumiso” por desoír lo que aprueba el Congreso. “¿Es que para sacar algo adelante hay que reservarle una mordida del 2% al Partido Socialista Obrero Español?”, preguntó irónicamente.
Sánchez defendió que los Presupuestos de 2023 “le sientan bien a la economía y a la sociedad española” en 2025, y pidió el apoyo de la Cámara para aprobar unas cuentas públicas “aún mejores” para 2026.
El presidente del Gobierno presumió de que son los “más expansivos” de la historia “en lo social” y permitirán que España tenga “por primera vez en 20 años un déficit público inferior al de Alemania”; y pidió a sus socios que apoyen el techo de gasto, que crece en un 8,5% y supera “por primera vez” los 210.000 millones de euros. “Señor Sánchez, donde no hay techo de gasto es en Ferraz”, le replicó Feijóo.
