Según los datos de la subasta el Tesoro ha colocado 1.726 millones de euros en obligaciones del Estado a quince años, que han salido a un interés marginal del 3,593%, inferior al 3,739% previo y el nivel más bajo desde hace un año. Más acusada ha sido la caída en la rentabilidad de otras obligaciones con una vida residual de cinco años y once meses, que han salido al 2,838%, frente al 3,686% anterior. De este tipo de deuda, el Tesoro ha vendido 1.198 millones de euros. Por último, en obligaciones indexadas a la inflación con una vida residual de diez años, el Tesoro ha colocado 505 millones. El interés marginal aplicado ha sido del 1,213%, también inferior al 1,590% previo.
La puja ha contado con una demanda de unos 6.500 millones de euros, con lo que la ratio de la subasta -diferencia entre lo solicitado y lo finalmente colocado- ha sido de 1,8 veces. Esta ha sido la segunda puja de la semana, ya que el martes, el Tesoro vendió 3.977 millones de euros en letras a seis y doce meses, pero con una rentabilidad menor, que en el caso de las primeras tocó mínimos desde junio, y en las segundas, desde mayo.